Yo Soy Tu Guardaespaldas |Momo y tu|

|Capitulo 39|

Las cosas estaban lista, el día de mañana en la mañana nos haríamos a aquella pacifica playa, Tania igual haría un trabajo en la ciudad, solo había venido unos días antes para ya haberse acoplado a la cuidad y no estar tan lejos de su objetivo, por mi parte termine de alistar mi maleta

Como todos los días de costumbre salía a correr hasta que sintiera mis piernas cansadas, poco después de 2 horas regrese a mi apartamento para cambiarme y salir a comer algo ya que no me apetecía cocinar.

El día de mañana estaríamos dirigiéndonos a aquel agradable y pacifica playa, yo soy la personas que trabaja los 365 días del años pero por primera vez me tomaría unas tranquilas vacaciones, por primera vez podía sentirme un poco emocionado, estar con la chica que amo y un grupo de amigas que quiero.

Me dirigí a una cafetería americana, al llegar pedí una desayuno completo, hotcakes, un café, fruta y unas enchiladas suizas, pedí los platos más grandes que habían, ya tener un cuerpo grande y hacer mucho ejercicio había que mantenerlo en forma.

Mientras comía revisaba algunos emails, algo que me intrigaba demasiado es que Imperial estaba localizando a todos los mejores y elites de la asociación para el evento, estaban buscando a los mejores para llevarlos, ya que se extendían por todo el mundo.

- Al parecer con la corona no bastará - dije hablándome a mi mismo -

Continué comiendo, ya estando a punto de terminar, reconocí a la chica que estaba entrando por por la puerta del restaurante, se sentó en frente de mí un tanto agitada.

- Vaya ni un desayuno tranquilo puedo tener - tome de fondo mi jugo de naranja y una mesera se llevó los trastes - como es que me localizan tan rápido

- Ya sabes que localizar a los miembros de corona no es difícil - revisó el perímetro con la mirada y sacó un sobre negro y me lo entregó - es el motivo por el que vine, solo hacia falta confirmarlo y hacérselo saber a ustedes

- Bien, déjame verlo no se porque es tan especial - tome el folder y lo abrí para ver su contenido sentí un calor recorrer todo mi cuerpo - Es enserio.?

- Los rastreadores lo siguieron hasta Seúl, pero fue cuestión de días para haber perdido comunicación con ellos - tragó saliva - Lo más probable es que los eliminó

- Entonces tengo que atraparlo.. - sonreí - tuvo la mala suerte de ser yo quien estuviera en Seúl...

- No puedes, sabes que también estuvo en la corona - llamo a la mesera y pidió un vaso con jugo de naranja - y aparte no olvides el evento, el resto ya lo sabe y están igual de histéricos que tú.

- Bien, pero si se cruza en mi camino... - suspire al ver su rostro, conocía esa mirada - pero no te angusties, no por nada son el tercero

- La ultima vez ninguno pudo contra el... - me tomo de la mano - eres mi mejor amigo, y a pesar de medir más sigo siendo mayor que tú

- Solo por un año - pedí la cuenta y pagué - pero no te preocupes, no are nada estupido, aún

Ambos salimos del lugar y había una camioneta de lujo afuera, se despidió de mí y subió a ella y se perdió entre las calles, di la vuelta y continué con mi camino, pensando en la información del sobre, sentía un odio y emoción de toparme con el.

- An pasado 4 años - Levante la manga de mi abrigo para ver la gran cicatriz de mi antebrazo - y esperado volver a toparme contigo maldito traidor...

Ya un poco más tranquilo regrese a mi apartamento, ya eran las doce del día, por lo que pensaba descansar el resto de la tarde ya que mañana conduciría hacia la playa, era más seguro que tomar un avión donde hay miles de personas, y llamar la atención así era muy peligroso para las chicas.

Cuando había entrado al edificio, entre al ascensor donde subí al piso donde estoy viviendo, para mi sorpresa habían tres personas en mi puerta, por un segundo pensé que era alguien del edificio o algo por el estilo pero nada que ver.

- Puedo ayudarles en algo.? - dije sin voltear -

- Enserio.? No nos vemos en un par de días y ya o nos conoces.? - La primera persona misteriosa en mostrar el rostro fue Jihyo - me dueles

- Uyy disculpa, pero vas tan cubierta que es imposible verte el rostro - pero aún faltaban 3 personas - Mejor pasen

- Wow, en verdad tienes buenos gustos - la siguiente chica era Sana - cuanto tiempo.!

- Hola amor - la tercera chica era momo, quien me dio un tierno beso -

- Hola hermosa - la tome de la mejilla y le di otro largo beso - igual me da gusto verlas chicas

- En verdad tienes una bonita casa - Jihyo se sentó en el cómodo sofá - rentas aquí o la compraste

- Gracias gracias, que honor que les guste mi humilde morada - entre a la cocina para servirme un vaso con agua - la compre, fue algo costosa por estar amueblada pero valió la pena

- Eeyy y todos estos dulces.? - dijo Sana emocionada mientras revisaba las cosas que tenía en la alacena que inmediatamente fue momo para comenzar a tomar de a montones - más de la mitad no las conozco.!

- Yo quiero.! - ambas empezaron a comer -

- Estás emocionado por la playa.? - me dijo Jihyo después de destapar uno de los dulces - las demás lo están y mucho, la mayoría quería venir pero no podíamos venir todas

- Por mi no hay ningún problema - me senté en el sofá individual - pero si, creo que por fin podremos darnos una tranquilas y divertidas vacaciones

- De que están hablando.? - Momo de dio un beso en la mejilla y se sentó en uno de los brazos del sofá donde estoy sentado -  

- Sobre el viaje de mañana, tendremos que salir temprano para llegar a medio día -

Continuamos platicando sobre cosas que quieren hacer llegando haya, probar las deliciosas comidas de haya, actividades recreativas, bebidas entre otras cosas, había caído la tarde y habían venido a recogerlas, me despedí de las chicas acompañándolas hasta la salida del edificio.

- Mañana nos vemos - me abrazo de cuello momo  -

- Correcto, descansa porque mañana será un largo día - la abrace de la cintura y la bese - hasta mañana amor

- Te amo - sarro depositando un beso en mi mejilla -

Subieron al vehículo y fueron llevadas hasta su casa, yo esperé algunos minutos hasta ver al vehículo desaparecer entre las calles, pocos segundos antes de entrar, sentí una presencia a lo lejos, sentía que me observaba.

- Serás tú..? - Lo mire fijamente mientras sonreía de oreja a oreja pero poco después desapareció al notarlo volví a entrar al lugar - acaso quieres casarme.?