ENGELBERT BARROW
Teníamos un cuerpo sin vida nuevamente frente a nuestros ojos y nadie decía nada. Todos estábamos descompuestos, un día estamos bien y al rato estamos involucrados nuevamente en esto sin un Richard que nos ayude.
—Podemos decir que fue en defensa personal. —hablo Audrey llamando nuestra atención.
Lennox había dado la excusa que había dejado su celular arriba cuando su celular estaba tirado en el piso, solo lo dijo para desaparecer un rato.
—Nadie nos creería nada. —se tiró al piso Nyle soltando su daga que apretaba con tanta fuerza minutos antes.
Lennox bajo corriendo por las escaleras con el cabello atado y un montón de trapos y unos frascos de limpiadores y detergentes. Se acercó a la escena y tiro todo tratando de limpiar lo que ya estaba arruinado.
—¿Qué estás haciendo? —la detuvo Nyle.
—Solo limpio. —le contesto en un susurro.
Seguía con el pecho desnudo y manchado de sangre, quería abrazarla, ella estaba en un estado muy poco de ella, no nos miraba a los ojos, esto era lo primero que dijo después de un rato, seguía en shock.
—No lo harás, estas mal.
—¡Estoy mal hace mucho tiempo! ¡Limpiare esta mierda así te opongas! —lo miro a los ojos.
—Deja eso, Len. —le dijo Audrey parándose del piso.
—No. ¿Qué lo deje? Lo quería muerto sin órganos, pero no me iré presa por la culpa de este imbécil que ni aun muerto deja de causarme dolor de cabeza, está muerto y aun así sigo angustiada.
—¡Deja esa mierda, Lennox! —le gritó Nyle.
Ella la miro y retrocedió chocando con el sofá dejándose caer en el recogiendo sus piernas y abrazándose a sí misma como siempre lo ha hecho.
No iba a estar aquí como un tarado mirando este caos, me quite el suéter que llevaba quedándome en una camiseta, se lo puse para cubrirla, se veía tan pequeña en mis brazos, dejó que la abrazara y me alegra que haya aceptado, por más que ella sea fuerte su miedo siempre se manifestó en una persona. Es lo peor como dijo Nyle, uno no merece tenerle miedo a alguien, debemos tener miedo a una mariposa, a un león como cualquier fobia, pero la de ella era ese desgraciado que la destruyó por dentro.
Escuchaba silenciosamente sus sollozos, nos miramos con los demás chicos, ella alzó su cabeza y me vio a los ojos, quería darle mi alma, mi alegría, mis emociones, mis pensamientos para que se sienta completa pero no soy quien para hacerlo.
Entre sus dedos había un cuadro al que ella se aferraba, ¿Cómo regresar la sonrisa que tenía en esta foto con la chica que llora desconsoladamente en mis brazos?
—Lo dejaremos ahí. —hablo Chloe. —Llamare a alguien que me diga como quitar huellas y todo lo que nos involucra. Engelbert te quedaras con ella en la Van mientras hacemos esto.
—Nosotros tres nos quedaremos. —Audrey se acercó a Nyle sobándole el hombro.
—Yo quiero quedarme. —se escuchó a mi lado. Lennox.
—No lo permitiré, yo lo hice, yo lo arreglo, déjame hacer esto por ti, no estas capacitada en estos momentos.
—Len, estuviste cuando necesitaba sin pedírtelo por más que te aburra las historias que te contaba me hacías conversación solo para no pensar en el desastre que tenía dentro de mi mente. —se acercó Chloe tomando sus manos.

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Hechos para ser uno solo
Diversos¿Cómo te imaginaste tu primer día en la universidad? Clases, fiestas, amigos, romances... Hay mucho más que averiguar en esta universidad, y las personas que entrarán lo descubrirán. La Universidad de los Andes, la más prestigiada, no solo por su ed...