Cap 9

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Apenas nos cruzamos un par de palabras en toda la mañana, un Buenos días, quieres un café y hasta el lunes, todo eso sin aguantarnos la mirada, me ponía colorada casa vez que me cruzaba con ella y a ella le pasaba lo mismo, solo había sido un sueño, el mejor sueño de mi vida pero no dejaba de ser un sueño.

Pasé la mañana entre cafés y cuadrando horarios con Vero hasta ella noto algo pero no dijo nada, yo me fui sobre la una, posiblemente sería uno de mis últimos fines de semana sin trabajo según la agenda de Vanesa y lo quería aprovechar al máximo con Lucía.

-Vero nos vemos esta noche en casa.

-Si pizza pelis de princesa.

-Luego una de miedo.

Le guiñe un ojo sabía lo poco que a ella le gustaban prefería ver las de princesas mil veces más.

-Vanesa nos vemos el lunes, tienes dos agentes fuera Veronica se queda un rato más.

-Vale.

Agachó la cabeza y salió sin mirarme, Vero me miró yo alcé los brazos en señal de no saber que mosca le había picado.

Fui primero a casa comi algo y me heche una hora la siesta, fui a por Lucía a casa mis padres, el abrazo de mi niña como si hiciera un año de no verme, las típicas preguntas de mi madre acompañadas de sus consejos, cargada de tapers de comida salimos de allí agotada mentalmente de escucharla, mi madre era así siempre en todo.

Pasamos por casa a por el bañador para pasar la tarde en la piscina, Lucía era un pato le encantaba el agua y siempre que podíamos pasábamos horas dentro del agua hasta estar arrugadas como una panza.

No pude evitar pensar en Vanesa que tal lucirá con un diminuto biquini, la boca se me hacia agua por no decir como me estaba poniendo mi sexo que palpitaba, esto no era sano, no iba a ser nada fácil.

Mientras jugábamos dentro del agua me volví a imaginar en el chalet de Vanesa y la tremenda piscina, Lucía disfrutaría en ella como una enana, se me vino a la mente ser una familia las tres cosa que me tenía que ir olvidando pero ya.

-Yo nadó mejor que tu y mas rápido mami.

-Eso habrá que verlo.

-Mami otra carrera!!

-La última ya es tarde y la tita Vero llegará a casa.

La última carrera después de cien antes, salimos agotadas del agua.

-Te he ganado mami.

-Haciendo trampas.

-Jajaja mentira mami.

Entre piques nos dimos una ducha luego merendo en el coche, fuimos a casa, nos pusimos el pijama de princesas, Lucía me había hecho comprar el mismo para las tres, Vero cuando llegó se puso el mismo.

No hablamos de trabajo siempre que estábamos presente con la niña, pedimos la cena mientras jugábamos las tres a cartas y nos reíamos contagiadas con Lucía.

Llegó la pizza pusimos la película que ya habíamos visto ya ni se cuántas veces, comíamos en silencio mientras Lucía repetía sin parar cada frase ya se la sabia de memoria.

Se quedó dormida en el sofá con su cabecita apoyada en mis piernas y sus piernas en las de Vero, las dos la mirábamos emocionadas tan chiquita tan inocente, llena de vida y de felicidad.

-Voy a meterla en la cama.

-Yo quito la mesa.

Cogí a mi niña la metí en su cama, bien arropada para que no pasara frío, un beso en la cabecita.

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