la guardaespaldas

Cap 8

-Yo.... Yo.... Esto no tenía que haber ocurrido.....

Malú de pie al lado de mi cama avergonzada nerviosa se había cubierto con mi camiseta, arrepentida de lo que estubo apunto de pasar, en unos segundos al tocar su piel se había olvidado mis pesadillas por que estaba aquí, era mi guardaespaldas tan solo hacia unas horas y esto pasaba en las películas pero esto era mi vida no una película, me había gustado hacía mucho tiempo que con un solo roce de piel me había hecho sentir tanto.

Me levante de la cama semi desnuda Malú tenía puesta mi camiseta, ella desvío la mirada a un lado con la cara   roja, tan tierna tan vulnerable, me fui acercando a ella  me sentía valiente ante ese cuerpo, al llegar a ella solo nos separaban un centímetro con un hilo de voz me imploro.

-Por favor cubrete.....

Ni siquiera se atrevía a mirarme, puse mi mano en la camiseta.

-El problema es que te has puesto mi camiseta.

Entonces me miró.

-Lo.... Lo siento era lo primero que he visto.

-Has sido tú la que has venido desnuda a mi habitación.

-Lo.. Lo siento otra vez.... No tenia ropa para dormir.... Siempre duermo así.... No volverá a pasar....

-Entonces damela.

-Eh....

Cojo la camiseta y se la quito, pero no me la pongo, la tiro al suelo y admiro su cuerpo.

-Eres preciosa Malú...

Paso mis dedos por su costado, su piel se eriza.

-Esto.... No está bien.....

-No te  estoy pidiendo matrimonio solo un poco de amor.

Voy más alla con mis dedos ahora perfilo sus pechos, sus pezones se ponen duros.

-Trabajo para ti.... No està bien.

Mi boca va directa a sus pechos paso la punta de mi lengua por ellos y muerdo su pezón, no puede evitar gruñir.

-Dios..... Yo.... Hace mucho... Que no estoy con una..... Mujer.... No se.

-Dejate llevar Malú......

Voy a su boca la beso con ganas ella sigue mi beso entro mi lengua buscando la suya pero aún a si la noto receptiva, me atrevo y cuelo una de mis manos dentro de sus bragas, como esta de mojada, solo paso mis dedos en su hendidura y la miró tiene los ojos cerrados y la boca entreabierta.

-Tu eres la que me vas a defender?

-Eh...

Abre los ojos y mira los míos, he tocado su orgullo, aprieta la boca y sus manos agarran las mía por las muñecas, pienso que la he cagado y  esto acaba aquí.

Pero no sus manos agarradas a las mías me da la vuelta empotrandome contra la pared, me coloca las manos encima de la cabeza, esto me pone y me vuelve loca, me sigue mirando a los ojos por unos segundos interminables, hasta que mira mis labios y luego mis pechos muerde su labio y sin soltarme muerde mi cuello y lo lame mientras una de sus piernas se mete entre las mías haciendo presión en mi sexo y ahora soy yo la que gimo sin poder evitarlo .

Suelta mis manos y agarra mi culo, hace fuerza para agarrarme en sus brazos entrelazando mis piernas en su cintura y me lleva a la cama, caemos las dos en ella, Malú encima de mi cuerpo y mis piernas en su espalda, damos vueltas en la cama ella abajo y luego arriba acariciandonos, besándonos sin parar, chupando mis pechos, rozando con los míos, volvemos a besarnos ahogamos nuestros gemidos en los  besos, de un tirón arranco sus bragas y meto mi mano volviendo acariciar su sexo, hago presión, presionó su clitoris pero quiero más quiero meterme entre sus piernas y eso voy hacer pero primero vuelvo a su boca saboreando sus labios, luego su cuello, sus pechos son pequeños pero tan apetecibles y tan duros sus pezones, los lamo con la punta de mi lengua sin quitar la mano de su sexo jugando con el, Malú se revuelve en la cama arrancando las sabanas del sitio y yo voy bajando por su cuerpo besando y lamiendo cada parte de su piel hasta su ombligo pero me quedo parada tiene una pequeña cicatriz lo que podría ser una cesárea Malú tiene hijos, tiene pareja ella había dicho que hacía tiempo que no, me siento un poco confusa pero da  igual ahora, lo importante es lo que tengo debajo de mi cuerpo una diosa que me vuelve loca, paso mi dedo por esa cicatriz y después la beso mientras con la otra mano y dos dedos la penetro fuerte Malú grita gime suspira, entonces saco los demos  y me meto entre sus piernas atacando su clitoris juego con el con mi lengua recorro todo su sexo con ella la penetro, sus manos yacen en mi pelo tirando de él haciendo presión para que no salga de ahí y si pudiera decirle que no que este tranquila que de ahí no quiero salir por horas.

Tengo que agarrarla para que no se mueva tanto o acabará ahogandome, un grito me dice que ha llegado al órgasmo, sigo lamiendo mientras aún tiembla, cuando cesan sus espasmos vuelo besando su cuerpo sin dejar de pasar por esa cicatriz hasta llegar a su boca donde comparto su sabor.

No me da tregua y me da la vuelta, sus ojos detallan lujuria y no pierde el tiempo va directa a mi sexo y joder lo que me hace con su boca y sus dedos me llevan al cielo en un minuto pero no tiene suficiente no sale de ahí hasta que no consigue que vuelva a tocar el cielo y grito de placer.

-Ahhhhhhhh!!!

Abro los ojos temblando, mareada, sin aire, pero no hay nadie encima de mi cuerpo, sus mis dedos los que están dentro de mí, no son sus bragas rotas son las mías que yo mismo me he arrancado, ha sido un maldito sueño, he soñado con ella, ha sido tan real, bese su cicatriz, joder me dejó caer frustrada en la cama por que joder por que no es real, miró la hora, són las seis de la mañana, una ducha fría será lo mejor para esta calentura que llevo y con que cara la podré mirar si será verla y pensar en este sueño tan real.

-Ahhhhhhhhhhhh!!

Grita Vanesa cuando llega al segundo órgasmo que se pensaba que yo no iba a poder después de lo que ella me había hecho.

Abro los ojos alterada y aún temblando de excitación, pero no hay nadie, no estoy en su cama estoy en la otra habitación, medio desnuda he tenido varios órgasmos esto si que ha sido real pero he sido yo pensando en ella, hasta me he arrancado mis bragas.

El portátil está apunto de caer de  la cama, me debi dormir mientras veía sus películas por cierto es una gran actriz, lo que provocó tener un sueño erotico con ella y maldito sueño, real como la vida misma, hasta beso mi cicatriz, mi cesárea, malita sea solo la conocía por unas horas y ya me volvía loca, céntrate Malú tu solo has venido para vengarte de Javier no para meterte en su cama, desecha esa idea, será mejor darme una ducha fría, miró la hora las seis de la mañana, esa ducha me sentará bien, y ahora como la miró a los ojos sin poder imaginarme este sueño.