Rain (KSJ x PJM)

016

Ya había vapor dentro del baño cuando Seokjin entró e inmediatamente se quitó la última prenda que vestía. 

Sin un ápice de vergüenza el azabache se paró detrás de Jimin quien todavía tenía su pantalón de pijama puesto mientras regulaba el agua de la ducha. 

—La temperatura es la ideal —Jimin miró por sobre el hombro y sonrió de lado. —Definitivamente tu no conoces la vergüenza. 

Seokjin sonrió sin mostrar sus dientes —la verdad es que no le veo caso a tener vergüenza en este momento, ya me has visto desnudo… Y no siento pudor en mostrar mi cuerpo ¿porque lo haría? Tengo el mejor jodido cuerpo que has visto, estoy seguro de ello. 

Jimin reprimió una risotada ante aquellas palabras y se giró para luego alzar una ceja en dirección al coqueto hombre enfermo que lo miraba con sus ojos levemente abiertos. 

—¿Tienes fiebre de nuevo? 

—Ugh, es difícil querer ser el único guapo en la habitación si tú estás cerca. 

—Bobo. 

Jin aprovechó que estaban muy cerca el uno del otro y pasó sus brazos por la cintura ajena. De inmediato el rubio envolvió sus brazos por su cuello y ambos sonrieron como unos tontos. 

—Vamos, no gastemos agua por puro gusto. 

—Cierto. Entra. 

Se separaron luego de eso y Seokjin dio un salto cuando Jimin golpeó suavemente uno de sus glúteos. El azabache sonrió mientras se paraba bajo el agua y lo siguió haciendo mientras su cuerpo se relajaban bajo el rocío. Apoyó sus manos abiertas sobre los azulejos y dejó que su espalda recibiera toda la atención. 

—Necesitaba de una ducha caliente —dijo cuando escuchó que Jimin entraba al espacio. 

—Y yo necesitaba verlo —Jimin lamió sus labios mientras paseaba su mirada por todo el cuerpo del más alto. 

Seokjin sintió la excitación recorriendo todas las partes de su cuerpo ante el tono bajo y oscuro del rubio. Sabía que Jimin lo estaba mirando y de alguna manera sabía que debía dar su mejor comportamiento para que el otro hombre tuviera una buena vista. 

Bajó la cabeza y abrió un poco su piernas quizá invitando al rubio a hacer cosas más interesantes que lavarse el pelo, pero el maldito resfriado parece que le quería joder la vida. 

Su vista se puso borrosa y su nariz comenzó a doler. Agachó la cabeza justo cuando esta comenzó a sangrar y chorros de sangre cayeron a sus pies. 

—Mierda.

Jimin de inmediato estiró su mano y tomó una toalla, hizo girar a Seokjin y para su alivio el sangrado comenzó a decaer de inmediato. Entonces él limpio su rostro con sumo cuidado.

—Creo que deberíamos salir, necesitas descansar. 

—Pero…

—No, nada de eso.

Seokjin abultó sus labios pero hizo caso, agachó su cabeza cuando un líquido frío cayó sobre esta y cerró sus ojos cuando Jimin comenzó a masajear lentamente y en círculos su cuero cabelludo. 

Amaba eso, amaba que le tocaran su cabello, pero lo que más le gustaba era que lo cuidaran, que alguien apartara algo de su tiempo para preocuparse por él, porque estaba resfriado y necesitaba mimos. 

Y no entendía como era que Park Jimin había descifrado tantas cosas de él en tan poco tiempo, que supiera exactamente lo que le gustaba, lo que le hacía sentir querido…