Rain (KSJ x PJM)

040

🌧️

Wow. 

Seokjin detuvo su Audi frente a una enorme mansión y no dejó de mirar aquella bella arquitectura hasta que su novio puso su mano sobre su muslo. 

—¿Estás bien? 

Jin asintió lentamente y más concentrado en el lujoso lugar que en la cálida preocupación de Jimin. Pero es que Seokjin no conocía de primera mano casas tan grandes como su área de hospitalización y eso era mucha para decir. 

A pesar de su trabajo y sus ganancias Seokjin seguía viviendo como le habían enseñado sus padres y tanto lujo lo ponía un tanto incómodo.

—¿Con cuántas personas vive tu padre? —preguntó mientras deslizaba sus ojos por la corrida de ventanas del segundo y tercer nivel. Era una locura si el anciano vivía solo en ese lugar. 

—Él y su servicio doméstico. 

Maldición. Seokjin lamió sus labios y luego se apoyó en el asiento, sus nervios aflorando porque cuando estaba a solas con Jimin olvidaba el origen de este. Olvidaba que su novio se había criado en mansiones, que había tenido servidumbre a su servicio, que jamás pasó ninguna necesidad económica entonces el peso de lo que él carecía caía en picada cuando pensaba en un futuro con el hermoso rubio. 

—¿Quieres volver? Puedo entrar solo, es una tontería la verdad… No quiero que te sientas incómodo. 

—No lo estoy —el azabache se volvió para mirar a Jimin y trató de sonar convincente pero como siempre falló ante esos ojos hermosos que lo conocían mejor que él mismo se conocía. 

—No mientas. Odio que hagas eso, no quiero que vayas a un lugar en donde no te sientes cómodo.

—Estaré bien, pero…

—¿Que es? Dime —pidió Jimin acariciando la mano de Seokjin que estaba sobre su muslo derecho. 

—Es intimidante… El dinero es intimidante, tu familia lo es.

—Sé que puede parecer mucho y lo es, de hecho lo es —Jimin suspiró —pero no puedo hacer nada en contra de eso. Ni siquiera puedo hacer algo para que no te sientas intranquilo cuando veas a los mayordomos o a todo el servicio doméstico de la casa. 

—No tienes que hacer nada —Jin resopló —no me hagas caso yo estoy un poco abrumado. 

Jimin hizo una mueca con sus labios pero no dijo nada más y cuando pensó que ya estaba todo dicho su novio tomó su mano y se la llevó a los labios para besarle el dorso de esta. 

—Te amo —dijo mirando los ojos brillantes de Jimin —solo quiero ser digno de tomar tu mano ante cualquier persona.

—Lo eres —Jimin sonrió aliviado cuando se dio cuenta de lo que Seokjin estaba pensando. —¿Crees que elegiría a un compañero que no estuviera a la par mía?

—No lo sé —Jin sonrió. —Espero que si.

—Desde que te conocí supe que eras diferente, que podía cambiar mis planes por ti y que no me arrepentiría. Y es así como me siento, te amo y eso es todo lo que importa. 

—Sigue siendo intimidante, cariño. Todo lo que te rodea aunque no lo desees, aunque no lo quieras… Todo esto va a ser tuyo. 

—Es cierto, pero no me importa realmente, seguiré siendo oncólogo, seguiré trabajando en lo que amo y seguiré a tu lado —Jimin se acercó a Seokjin y le dio un beso. Sus dientes mordieron ligeramente el labio inferior y cuando su novio suspiró buscando más, él supo que lo había distraído lo suficiente para que apagara sus pensamientos.