Tirada sobre su espalda en el patio delantero mientras Cali le lamía el rostro y se posiciona sobre ella, Dixie dejó salir una risa eufórica. Había pocas cosas que disfrutaba tanto como jugar con su cachorra, y quería creer que Cali pensaba lo mismo.Había planeado llevarla al parque a jugar un rato al ser sábado, pero su patio también era enorme y podrían jugar allí en lugar de ir a un lugar bullicioso lleno de niños torpes que solían correr sin detenerse a ver alrededor, ocasionando que a veces, cachorros indefensos fueran lastimados.
—Qué linda sonrisa tienes aquí, cosita hermosa —murmuró la pelinegra al tiempo que acunaba el hocico de Cali con una mano y usaba la otra para frotarle la barriga—. ¿Quieres un premio?
Por obvias razones, Dixie no esperaba una respuesta verbal, pero una voz delicada la llamó desde el otro lado de la reja, lo que hizo que Cali saliera de encima de su dueña y gruñera en dirección a la rubia, quien tragó saliva de forma forzada y dio dos pasos cautelosos hacia atrás. Las orejas de la cachorra estaban en alto y mostraba sus incisivos de forma amenazante.
—Ah. Hola, Addison —la saludó la pelinegra al tiempo que rodaba sobre su estómago para quedar boca abajo en el césped—. ¿Vienes a jugar conmigo y Cali?
Al escuchar su nombre, la cachorra movió su cola con efusividad, y Dixie le regaló una caricia delicada en la cabeza, pero apenas Addison volvió a hablar, Cali volvió a su posición alerta.
—Me gustaría hablar contigo, si eso está bien —comentó con cautela, y la pelinegra frunció el entrecejo con confusión.
—¿No es lo que estamos haciendo?
—A lo que me refiero es a que me gustaría decirte algunas cosas —dijo al fin, y desvió la mirada apenas una milésima de segundo para cerciorarse de que la cachorra seguía en su lugar—. También me preguntaba sobre lo que sucedió ayer...
—Muchas cosas sucedieron ayer —Dixie por fin se puso de pie e hizo su camino hacia la reja que la separaba de Addison—. Sácame de una duda, ¿de dónde eres?
—Kiev —respondió la rubia de forma automática—. Ahora tú respóndeme algo.
—Uhm... no prometo nada —murmuró la pelinegra al tiempo que colocaba sus codos sobre la reja, lo que hizo que Addison se acercara para también apoyarse en ella—. Dispara.
—¿Por qué ayer me besaste de forma tan brusca cuando estaba hablando con Carla? No es que me haya molestado, pero...
—¿Cómo? ¿Así?
De forma rápida, Dixie la tomó por las mejillas con la misma fuerza del día anterior -más que nada porque recordó la manera demasiado amistosa en que habló con Carla- y la besó con fuerza.
Addison jadeó a causa de la sorpresa, y cuando la pelinegra separó sus bocas, tardó un segundo más en soltar sus mejillas, mismas que estaban ruborizadas de forma tenue, y al igual que el día anterior, sus labios quedaron enrojecidos y decididamente besables luego del arrebato de Dixie.
—Tengo una idea —murmuró la pelinegra al tiempo que daba un par de pasos hacia atrás -hasta llegar a donde Cali estaba, pues no se había movido de su lugar, seguía en posición alerta- y se humedeció los labios—. ¿Por qué no abres la reja, entras y conversamos en mi sala?
Addison tragó saliva y miró con duda en dirección a la pastor belga, misma a quien Dixie le regaló una caricia en medio de las orejas antes de empezar a caminar al interior de la casa. Cali permaneció en su lugar, observando detenidamente cada movimiento de la rubia.
—Te espero adentro, ¿de acuerdo? —La pelinegra dedicó una última mirada por encima de su hombro y esbozó una sonrisa maliciosa—. Prepararé té.
~~~~~~~~~~~~~
Perdonen por no haberles subido caps estos días, e estado muy ocupada haciendo deberes y esas cosas :) ya mismo término mi año Escolar entonces se acumulan más deberes y proyectos :)
Linda noche ❤
![](https://img.wattpad.com/cover/266879617-288-k955432.jpg)
ESTÁS LEYENDO
"𝚂𝚝𝚘𝚕𝚎𝚗 𝚔𝚒𝚜𝚜𝚎𝚜"
FanficDonde Addison tiene un crush enorme en Dixie D'amelio, la presidenta del Club de Ajedrez, y busca formas ingeniosas de robarle besos cada vez que se topa con ella. ¡Atención! Capítulos extremadamente cortos. Esta es una adaptación, todos los crédit...