• AMORES DE INSTITUTO • [2]

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- - - - - - - - - - - - Familia de 4 - - - - - - - - - - -

- Pero qué bonito que eres , mi pequeño , eres precioso - decía Luzu , mientras acariciaba con la punta de su dedo la nariz del pequeño cerdito .

Estaba sentado en la alfombra nueva del suelo , con el pequeño animal jugando en su regazo , mientras Auron lo miraba desde el sofá con mala cara .

- ¿Hace falta que le hables así? Que es un cerdo , no un niño - dijo rodando los ojos .

- A Manolo le gusta que le hable así - se defendió el castaño , volviendo a centrarse en el pequeño cerdo rosado .

Raúl volvió a rodar los ojos .

- Sigo sin verlo justo...

- Auroncito , ya lo hemos hablado .

- ¿¡Porqué tu puedes tener un cerdo y yo no puedo tener un pollo?!

- Porque yo ya tenía a Manolo ¿Que querías que hiciera , que lo dejase en la calle , que se lo llevasen mis padres? Es mi hijo , y tiene que estar conmigo .

- Pues yo quiero un pollo .

- Auron , no .

- ¡Joo Luzu , no es justo! - se quejó el menor , haciendo un puchero y cruzándose de brazos .

- Auron , no se puede tener un pollo en el salón ¿Pero qué locura es esa?

- Ah , ¿Y un cerdo sí?

- Manolo es muy tranquilo , no hace nada . Además ¿Has visto lo preciso que es mi niño?

- Ñiñiñi...pues yo quiero un pollo .

- Ve al supermercado .

- ¡Uno vivo! Para tenerlo de mascota .

- Que no Auron , que no vamos a tener un pollo .

- Pues me enfado .

- Auron...- Luzu se giró para mirarlo con una pequeña sonrisa , pero el pelinegro no le hizo caso y se levantó del sofá para encerrarse en el cuarto , cerrando la puerta con fuerza .

Se levantó también del suelo , dejando ahí a Manolo , que intentaba saltar para subir al sofá .

- Auron , que la casa es muy pequeña para tener a dos animales...

- ¡Un pollo casi no ocupa sitio! - escuchó al menor gritar desde dentro .

- Ay...- el castaño suspiró , no entendía la obsesión que le había dado al pequeño por tener un pollo de mascota de un minuto a otro - ¿Y un gato? ¿No quieres un gato? Uno pequeñito .

- ¿Un pollo no pero un gato sí?

- Bueno , es que no es lo mismo...

- ¡No quiero! ¡Yo quiero un pollo!

Borja llevó una mano hasta la perilla de la puerta , pero no pudo abrirla , había puesto el seguro desde dentro .

- Venga Auron , sal ya ¿Enserio te vas a enfadar por esta tontería?

- ¡No tienes en cuenta mis sentimientos! Sabes la ilusión que me hace un pollo y no te importa una mierda...- lloriqueó el menor desde dentro .

Luzu se cruzó de brazos y se apoyó en la pared , al lado de la puerta . Sabía que todo ese berrinche se le pasaría en un par de horas , cuando se cansara , o cuando le entrase hambre , o sed... pero también sabía que solo intentaba salirse con la suya .

¿Pero cómo iban a tener un pollo en la casa?

El caso de Manolo era distinto , era un cerdo muy pequeño y muy tranquilo que cuando vivía en Nueva York lo tenía en el jardín de la casa , pero ahí no tenía jardín , y ya bastante era tenerlo a él como para encima otro animal . Y no uno cualquiera , tenía que ser un pollo...