• AMORES DE INSTITUTO • [2]

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- Mis padres vienen de camino hacia aquí...

- Willy , tranquilízate .

- ¡Estoy muy tranquilo! ¿¡Vale?!

- Que te va a dar una taquicardia , chiqui , respira...

- Vegetta , que están de camino , me van a matar ¡NOS van a matar!

- Solo es cuestión de explicarles las cosas ¿Que tan malo puede ser? - preguntó Rubius encogiéndose de hombros .

El menor daba vueltas de un lado hacia otro por todo el salón , desquiciado , mientras Vegetta pensaba en qué les iban a decir para calmar la situación y Rubius comía mientras repetía una y otra vez al albino que solo exageraba .

- No tendría que haberos echo caso...¡Debería haberme quedado en mi casa! ¿Que voy a hacer ahora? Dios , no volveré a ver la luz del sol hasta que mis padres mueran...

- Anda mira , pues no es mala opción ¿Un envenenamiento? - dijo Rubius , ganándose las frías miradas de los otros dos - ¿Que? Un poco de lejía en la sopa y se acabó el problema - Vegetta negó con la cabeza mientras rodaba los ojos - Solo era una idea - se defendió el castaño .

- Pues deja de dar ideas , Doblas , no se te da bien pensar .

- ¡Oye! Que lo de secuestrar a Willy de su casa fue MI idea .

Willy soltó un bufido y se dejó caer en el sofá , escondiendo su cabeza bajo una almohada .

- Se acabó , voy a morir , es el fin de mi vida...

- No digas eso , chiqui . Vamos a hablar con tus padres , seguro que lo podemos arreglar pacíficamente .

- Estamos en esta situación precisamente porqué a tí se te ocurrió hablar "pacíficamente" con mis padres SIN CONSULTARMELO .

- Voy a por más galletas de estas ¿Queréis que os traiga?

- Quizás si les ocultamos que estás aquí...si no sabes dónde estás no pueden hacer nada ¿No?

- Oh , claro , para que piensen que me han secuestrado de verdad o algo así y llamen a la policía ¿No? ¡¿Pero que tontería es esa?!

- ¡Pues lo que se me ha ocurrido!

- ¿Queréis galletas o no?

- Pues no les abrimos la puerta , hablamos desde detrás de ella .

- Llamarán a la policía para que tire la puerta abajo , creeme , conozco a mis padres demasiado bien...están locos...

- Oye ¿Me estáis escuchando? Que si queréis galletas .

- Vamos a darlo por perdido , me van a hacer volver a Irlanda y no volver más aquí , ya está...no hay solución...

- Oh , vamos...tiene que haber algo que podamos hacer...

- ¿Vais a contestar a mi pregunta , o no?

- ¡Que no queremos galletas , Doblas!

- ¡¿Puedes dejar ya las putas galletas?!

Rubius se sobresaltó por los gritos de los otros dos e hizo un puchero .

- ¡Oye! Si estáis enfadados no lo paguéis conmigo - se quejó , levantándose para ir a la cocina , todavía con su pijama de ositos y su plato de galletas vacío , con el gorrito de orejas de oso del pijama puesto en la cabeza .

Vegetta soltó un largo suspiro y estiró la mano para agarrar la redonda colita de oso del pijama , estirando hacia atrás y haciendo que el castaño retrocediera hasta caer de nuevo en el sofá , con los labios y el ceño fruncido a modo de enfado .