Grey | Min Yoongi; BTS

once

Llevaba una hora y media aproximadamente hablando por videollamada con mi padre. Quedaba cada vez menos para mi debut, lo cual significaba que dentro de nada tendría menos poco tiempo libre del cual ya disponía en ese entonces, por ello le pedí a mis compañeros que me cubrieran un par de horas en el ensayo para llamar a mi padre a una hora razonable. Sabía que aquello podría tener consecuencias, aún así asumí el riesgo, me daba igual tener que ensayar hasta altas horas de la madrugada o trabajar el doble que los demás, en ese momento necesitaba hablar con mi padre. Taehyung me había invitado a tomar algo a su piso—el cual hacía nada había sido también el mío—y estábamos los dos juntos charlando con mi progenitor mientras él desayunaba, pues apenas eran las once de la mañana en España. Parecía feliz con sus tostadas y café, charlaba animado y de vez en cuando soltaba alguna palabra en español con pésimo acento, lo cual a mí me hacía reír y dejaba a Taehyung sorprendido.

Taehyung, al haber sido mi primer amigo cuando era una adolescente, era adorado tanto por mi padre como por mi madre, sin embargo, cuando mi padre se enteró de que decidimos ser más que amigos hacía ya más de un año, su actitud hacia él cambió un poco, aunque a penas le duró un par de semanas su forma de tratarle. Entendí entonces que mi padre decidiera ponerse en modo padre protector aunque también me llamó la atención que tras tantos años conociéndole decidiera interpretar ese papel. Y, bueno, como ya he mencionado a mi padre se le pasó rápido la tontería pero no sé si era mejor que hubiera seguido ya que pronto empezó a "planear" nuestra boda, de hecho siempre que hablábamos durante tanto tiempo sacaba el tema justo al final, como para coronar con una cereza el pastel, y si encima estaba Taehyung estaba delante era mucho mejor para él. No sabía si de verdad le urgía que nos casáramos o simplemente le gustaba hacerme de rabiar, pues siempre que hablábamos de bodas yo me quejaba.

—Aquí hacen celebraciones muy bonitas, podríais casaros en una playa—decía mi padre, dirigiéndose más a mi novio que a su propia hija. Podía ver como sonreía hablando de aquello, tanto que se le achicaban los ojos.

Y Taehyung sonreía también. Sabía que a él le encantaba que mi padre le pusiera las cosas tan fáciles además de claras: mi padre le quería en nuestra familia. A mí, por otro lado, me agobiaba el tema de conversación. Me sentía aún muy joven como para querer hacer esos planes de futuro tan a largo plazo y hasta agradecía que aún a ninguno de los dos se les hubiera ocurrido hablar de tener hijos. Yo tenía unos planes mucho más inciertos, quería hacer música, viajar por todo el mundo... No lo veía del todo acorde con un plan típico, un romance idealizado, una vida prototípica en la que mi día a día se transformaría en una rutina insípida. Yo no quería esa vida, aunque sí me gustaría casarme, pero lo veía tan lejano...

—Señor Shin, sería un gran honor poder casarme algún día con su hija—respondió rápidamente Taehyung, con una leve sonrisa y girando su cabeza para mirarme a mí en el último momento—, pero ahora estamos bien así.

—Sí, además dentro de nada voy a estar dando conciertos seguramente y trabajando mucho...

—Menuda excusa estúpida—farfulló mi padre—. No os estoy obligando a casaros mañana pero espero no morirme para cuando decidáis dar el paso.

—¡Papá!

Mientras Taehyung y mi padre reían, yo me ofendí bastante. No era la primera vez que hacía un comentario de ese estilo, ni siquiera era tan mayor como para entrar en un franja de riesgo y a mí me entraban mareos cuando me imaginaba un mundo sin mi padre. Había tenido suficiente con perder tan rápido a mi madre, no creía que fuera justo quedarme huérfana en mis veinte. En otras palabras, me causaba dolores de cabeza y mucha ansiedad la simple mención de esa posibilidad.

—Bueno chicos—de pronto mi padre cogió el móvil y le puso muy cerca de la cara, seguramente buscando algún botón o para leer un mensaje—, ha sido un placer charlar con vosotros pero tengo que irme así que os dejo ya...