Te encontré

47. Quédate

Punto de vista de Kara

- Madre - Dijo Lena decaída.

- No abras Lena, estamos hablando - Pidio Kara, quería contarle quien era en realidad. De dónde venía. - Dile que luego la buscas.

- Creeme es mejor abrirle - Dijo separándose de Kara.

- Lena debes saber una cosa de mi... - Kara la agarró del brazo - Porfavor.

- Kara - Volvió para besarla. Sonó de nuevo la puerta - Te amo, te prometo que continuaremos esta conversación.

Kara estaba tan confusa. ¿Como se podía torcer tanto una situación en cuestión de minutos?

Lena era una luthor, un miembro de la familia enemiga de su familia.

Una parte de ella le gritaba que saliera de ahí, que se alejará de ella, que solo le traería problemas, que conforme supiese quien era todo su amor se tornaría odio.

Pero todo su ser estaba en contra de esos pensamientos.

Kara amaba a Lena, amaba todo de ella, desde esa forma desesperante de tener todo en orden a su desenfadado y relajado ser tras sus sesiones de yoga.

Amaba a Lena por ser ella, por contarle todo. Si, le había ocultado una parte importante de ella, pero Kara también. Seguía enamorada de Lena, y más que nunca, pues no le ocultaba nada, y esperaba que su madre se fuese pronto para desvelarle su origen.

Lena abrió la puerta con expresión abatida. Kara no soportaba verla así.

Se notaba que la familia de Lena le afectaba mucho.

- Lena te vienes conmigo, ¡ya! - La madre de Lena arrasó cuando entró imponiéndose.

- Madre ¿Qué haces aquí? - Lena caminó hacia Kara.

- No te lo voy a decir más veces, vamonos.

- No, no me voy a ir contigo, lo siento - Lena se puso delante de Kara en clara pose defensiva, cubría con su cuerpo a Kara, quien intentó tranquilizarla cogiéndole la mano.

- No me voy de aqui sin ti y te aseguro que no me apetece nada estar en este sitio - Dijo Lilian con asco mirando a su alrededor

- Disculpe señora - Kara se colocó delante de Lena - Pero Lena y yo estamos en una cita.

- Basta, tu, no eres nadie. Tu, no sabes ni delante de quien estas - Dijo señalandose a si misma - ni quien es ella. - Señaló a Lena.

- Oh, no, estoy con Lena, la mejor persona que jamás haya conocido, y de quien estoy profundamente enamorada - Giró la cabeza para mirar a Lena, quien tenía los ojos teñidos de resentimiento, Kara supuso que era hacia su madre, la miró llena de amor, Kara percibió como cambiaba su novia ante su madre. - Y usted, si no me equivoco es Lilian, la matriarca de la familia Luthor. Quién está estropeando mi cita con su hija.

- Oh, sabes quien soy - Con una medio sonrisa miró a Kara, ignorandola, mirando directamente a Lena - Lena, si no quieres que esta jovencita pague las consecuencias de tu desobediencia. Ven conmigo, ya. - Dijo alzando la voz en su última frase.

- No, madre, iré contigo, olvidate de ella - Lena apartó a Kara. Que no entendía nada - Kara por favor, espérame en mi habitación del campus. - Lena le suplicó.

- Vas a tardar en volver, unos asuntos nos van a entretener - Interrumpia Lilian.

- Bueno, volveré cuanto antes - Lena abrazó a Kara - Te amo - Susurró en su oído.

- Lena, no te vayas así. Quedate. - Suplicó Kara rompiendo en llanto. Sentía que algo no iba bien.

Kara vió como Lena se marchaba junto a su madre. Se derrumbó y se deshizo en lágrimas conforme la puerta se cerró.

Algo dentro de su corazón le gritaba que algo pasaba. Cogió su móvil.

Imra ven si puedes al departamento, urgente.

Cogió el cuaderno donde estaba escrita toda su historia, ojeando sus páginas, mirando los dibujos que ella misma había dibujado.

- ¿Por qué siento que te estoy perdiendo? - Dijo a la nada.