V

801 93 29
                                    

Ayer luego de lo ocurrido en la laguna, acompañé a Benjamín al hospital, porque parecía ser la más cuerda por el momento

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Ayer luego de lo ocurrido en la laguna, acompañé a Benjamín al hospital, porque parecía ser la más cuerda por el momento. Él estaba en una especie de shock, mientras que sus amigos, cada vez que intentaban hablar terminaban balbuceando, por lo que el oficial de policías de pueblo, le pidió que fueran a sus casas a descansar, porque más tarde tendrían que ir a testificar, por algo de protocolo.

Cuando Rut llegó al hospital comenzó a gritarle como una loca a Benjamín por no haber cuidado bien de su hermano, pero cuando Eva la abrazó, solo comenzó a sollozar y a susurrar lo siento repentinas veces.

Esta mañana, la misa de cada domingo ha sido dedicada al pequeño Enoc, en donde todos lloraban por el pequeño angelito, como lo llamó el sacerdote Jeremías.

Todas las familias del pueblo estaban reunidas, por lo que la iglesia parecía pequeña. Los domingos siempre falta una que otra familia, por lo que siempre queda un espacio libre, pero esta mañana todo el pueblo estaba reunido, a excepción de Samael y su familia, lo que es entendible, ya que ellos llegaron hace poco al pueblo y no vieron crecer al pequeño Enoc.

Mañana, han decidido suspender las clases, para que podamos asistir al velorio de Enoc, que será en la mañana, por lo que el martes intentaremos retomar todo con "normalidad", si es que se puede llamar normalidad, porque luego de estas dos perdidas, no creo que el transcurso del año sea como los anteriores. En este pueblo estamos acostumbrados a perder a los ancianos, debido a que su ciclo de vida ha terminado, pero dos menores de edad es un golpe más fuerte.

Me coloco el pijama y me acerco a mi escritorio para quitarme mi pulsera y dejarla en mi pequeño joyero. Más bien, es un collar, el collar que me encontré en el bosque hace unos años, pero como yo ya llevo un collar en mi cuello, la enrollo en mi mano y de vez en cuando me la quitó, porque me lastima.

༺✞︎༻

Me visto con mi pantalón negro y un suéter del mismo color. En el primer piso, mi madre ya tiene el desayuno preparado. Ella lleva un traje negro que usa de vez en cuando en su trabajo, mientras que su cabello va perfectamente peinado.

—Yo ya desayuné —me informa —Tengo algo que decir.

—¿Si? —me siento frente a mí desaparecido.

—Posiblemente tu padre venga el siguiente fin de semana —me dedica una sonrisa —Ahora iré a dejar una ropa al lavado.

Mi mamá y mi papá se separaron hace poco más de un año, pero no de manera legal, por lo que aún siguen casados. Mi padre encontró trabajo hace 3 años en una ciudad a aproximadamente 5 horas de aquí, lo que lo obligó a mudarse y solo lo veíamos una vez al mes. Mi madre aguantó eso por más de un año, aunque después de eso no lo soportó más y decidieron que papá debía llevarse sus cosas de manera definitiva. Sin embargo, se llevan bastante bien, por lo que tienen una relación amistosa. Mi padre sigue viniendo una vez al mes, por lo que las cosas no han cambiado mucho, la diferencia es que ambos son libres de rehacer sus vidas si así lo quieren. La cosa es que, ninguno lo ha hecho, siguen "solteros" dentro de un matrimonio.

El collar de la MuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora