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La música resonante hacía temblar el lugar, los cuerpos sudorosos se movían entre sí, saltando e intentando cantar por sobre la música, bailando tan pegados que no estaba muy claro dónde empezaba uno y dónde acababa otro. Habían luces neón por todas partes; en las paredes, algunas en rincones, en la barra y en la escalera que llevaba hacia la zona VIP del segundo piso. Todo tan perfectamente posicionado que le gustaría estar allí por siempre.

En su rostro habían dibujos hechos con pigmentos fluorescentes, no era el único, todos en aquella fiesta se encontraban igual, solo que con diferentes bocetos, cada uno más original que el anterior. La persona que los estaba haciendo era increíble. Le dio un último sorbo la bebida en su vaso y la dejó sobre alguna mesa a la que no le tomó mucha atención. Al principio se había negado rotundamente a pintarse el rostro, pues le costó tanto recuperar su antigua vida y volver a reintegrarse, que seguía siendo un poco tímido en este tipo de cosas. Pero como la adrenalina y su emoción era más grande que la vergüenza, acabó por aceptar.

Desvió la mirada hacia un punto fijo y que conocía muy bien, ahí había un chico mirándolo tras su propio trago y sonriendo de oreja a oreja. Agachó la mirada momentáneamente, le daba gracia toda esa situación.

Hace un tiempo atrás no hubiese pensado que estaría ahí.

Se despidió del chico con el que estaba bailando antes y fue directo hacia esos lindos ojos marrones que lo miraban tan atento.

─¿Te diviertes? ─cuestionó.

Le quitó el vaso y lo dejó a un lado para sentarse sobre sus piernas. Esos brazos no tardaron en rodearlo y acercarlo un poco más para que no fuese a caer. Siempre lo hacía.

Hyunjin asintió, mientras mordía su labio inferior para suprimir la sonrisa que se le quería escapar.

─Se podría decir que sí. ¿Y tú?

─Bueno... ─suspiro ruidosamente─. Ese chico estuvo todo el rato hablándome sobre mecánica y cosas que no comprendo en lo absoluto. Lo gracioso fue que cuando le mencioné que estudio Astronomía, no supo qué era.

─¿Cuántos van que no lo saben? Es que en serio no entiendo, se supone que la astronomía es algo básico.

Jeongin elevó los hombros, él tampoco lo tenía muy claro. Quizás sólo les gustaba hacerse los idiotas y fingir, así tendría que explicarles que su misión es estudiar el universo y todos sus componentes. Sin embargo, no es algo de lo que le hablas a otra persona para conquistarla en una fiesta neón o para pasar el momento.

Con Hyunjin le funciona a la perfección, pero Hyunjin lo escucharía hablar hasta de lo más absurdo existen en todo el mundo. Así que él no entra en ello.

─Tengo la ligera sospecha de que es adrede.

─Estadounidenses ─negó con la cabeza y se acercó a su rostro─. ¿Quieres volver a casa? ─dijo sobre sus labios lo suficientemente fuerte para que pudiese escuchar por sobre la música.

Jeongin rió y agachó su cabeza.

─Es extraño si lo dices de esa manera, ¿sabes?

─Por lo mismo lo hago ─y finalizó la conversación con un casto beso en la frente─. Te ves cansado, volvamos.

ESTADO DE HYUNJIN.

ESTADO DE HYUNJIN

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