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─¿Desde cuando tienes piscina? ─Hyunjin preguntó, observando como el agua cristalina se movía de un lado a otro debido a que Donghyuck había lanzado un juguete que había encontrado por allí.

Chenle se quitó los lentes de sol y sonrió.

─Hace poco, no les dije porque... Bueno, en realidad, no hay ninguna razón.

─Simplemente no querías que estuviéramos aquí.

─En efecto ─comentó y comenzó a reír de inmediato debido a la mueca en el rostro de Hyunjin, movió sus manos de un lado a otro, mientras seguía riendo─. ¡Es mentira! Si soy sincero, lo olvidé.

─Sí, claro...

Había pasado un largo tiempo desde la última vez que todos estuvieron ahí, simplemente pasando la tarde, hablando sobre cualquier tema y riendo hasta que les doliera el estómago. Así estuvieron, incluso algunas víctimas cayeron al agua; Hwang Hyunjin y Yang Jeongin, para ser más exactos. Aunque ese último fue arrastrado con su novio por querer defenderlo de Donghyuck y Minho cuando lo estaban empujando. Hasta que el sol comenzó a ocultarse y decidieron seguir adentro.

Improvisaron con una mesa que se veía de todo, menos estable. Sobre ella dejaron bebidas, un poco de alcohol, pero no tanto, porque realmente no estaba en sus planes emborracharse esa noche, y unas cuantas golosinas con las frituras suficientes para pasar el rato.

─Además, no entiendo para qué tanto drama, miren a Hyunjin y Jeongin ─dijo Jaemin, señalando al par sentado en el sofá con las piernas enredadas, mientras se secaban el cabello entre sí─. A ellos los veo bastante bien...

Pero Donghyuck negó con la cabeza.

─Hay casos y casos, yo sólo te dije que la mayoría de las veces no es igual cuando vuelves con tu ex. ¡Tú lo relacionaste con algo negativo!

─¿Qué acaso no te escuchaste a ti mismo? Tu tono de voz lo dijo todo.

─Y yo recuerdo a Jeongin decir que se habían tomado un tiempo, no que terminaron definitivamente. Tus argumentos son horribles
─le sacó la lengua.

El resto presente en la sala se encontraba atento al debate que estaba acabando en discusión, algunos comían para mejor experiencia y otros fingían entender lo que hablaban, pero en realidad ya andaban en otro mundo. Un claro ejemplo es Park Jisung, que se había perdido en cuanto comenzaron.

─¿Por qué eres tan negativo con eso? No todo es tragedia, ¿sabías?

─Entonces vuelve con Renjun y me cuentas cómo te va ─dijo por último, masticando una fritura y riendo por lo bajo.

El recién nombrado y Jaemin se dedicaron una mirada con el rostro serio que se fue en transformando en una mueca de asco poco a poco.

─Ni siquiera lo pienses ─dijo Renjun.

Chenle bostezo desde su lugar, abandonó la discusión que ya no daba para más y fue en busca del control remoto del parlante para así dejar de escuchar las voces de sus amigos y las  historias extrañas que salían de la boca de Jeongin.

─¿Han Jisung? ─mencionó uno de los chicos y Chenle giró de inmediato, buscando a la persona que había dicho eso.

Había sido Felix.

Y junto a él se encontraba el chico recién nombrado, cabello castaño claro casi tapando sus ojos, pantalones sueltos y una sudadera amarilla que le llegaba hasta los muslos. ¿Acaso no tenía calor? Quizás las noches se estaban volviendo un poco frías, pero en el día seguía haciendo tanto calor como si estuviesen en el mismísimo infierno.

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