Capítulo 3: Gente nueva

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NARRA ANA:
Eran ya las 8:00 pm, lo que significaba que había acabado, era la primera vez que trabajaba, fue divertido y logré aprender un poco de la época con la gente que venía, hubo un chico con una asombrosa voz, al parecer el venía constantemente a dar el show, siempre era él o un grupo, se turnaban para dar un pequeño concierto en vivo y a la gente le gustaba eso.

Ya no había nadie en la cafetería, solo Daniel haciendo cuentas, el chico guardando su guitarra, desconectado cables, y María y yo limpiando para cerrar.

Tío (Daniel): - Buena presentación la de hoy Andrew. - Escuché decirle mientras pasaba el trapo por la mesa.

Andrew: - Sabes que es un placer.

Tío: - Mmm... El único placer es la paga, no es así? - Le dijo bromeando.

Andrew: - Bien sabes que es un poco de ambos. - Hicieron algunos chistes y bromas un rato.

María y yo dejamos todo impecable y nos acercamos a ellos para despedirnos. Ella me ofreció quedarme en su casa el tiempo que necesitara.

María: - Andrew, tío, nosotras ya nos vamos.

Ana: - Gracias por todo Daniel. Aprecio mucho esto.

Tío: - No es nada, además si que hacía falta alguien más, este lugar quedó increíble, asombroso trabajo chicas.

Ana: - Por cierto, tocas y cantas fantástico. - Le dije a Andrew, quien me sonrió. - Soy Ana.

Andrew: - Gracias, soy Andrew. Un gusto conocerte, un gusto también venir a trabajar y ver a dos lindas chicas mientras canto, eso sí es un buen trabajo. - María me dió un pequeño codazo y yo sonreí para disimular.

 - María me dió un pequeño codazo y yo sonreí para disimular

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Tío: - Eyyy! Hablas de mi sobrina.

Andrew: - Oh, solo decía. No dije nada que no fuera cierto. Solo por ustedes vienen tantos clientes.

El chico dijo todo muy amable y en forma de broma, lo cual me hizo sentir en confianza pronto.

María: - Bueno, ahora sí nos vamos. Adiós, hasta mañana. - Nos despedimos y fuimos caminando.

Ana: - ¿Qué pasó ahí adentro?

María: - ¿No viste como te veía? Le gustaste.

Ana: - No creo, solo fue amable, además no le puedes gustar a alguien con solo verlo un día.

María: - claro que sí, se llama amor a primera vista.  - Reí, pues recordé como mi corazón palpitaba más rápido desde la primera vez que ví a Cinco.

Ana: - No te diré que no creo en eso. Pero no me interesa nadie más.

María: - ¿Nadie más? Significa que alguien ya está en tu corazón?

Ana: - Si, hay alguien.

María: - Tu novio debe estar muy feliz de estar contigo.

Ana: - No somos novios. - Abrió los ojos sorprendida. - No aún.

María: - Estás esperando a que te lo pida?

Ana: - Más bien espero encontrarnos pronto.

María: - ¿No venías solo con tus hermanos?

Ana: - Es complicado, él venía con nosotros.  - Giramos en una esquina encontrándonos con una bonita casa.

María tocó la puerta y una bonita mujer peli negra abrió la puerta. Me miró y sonrió, nos dió pase a la casa.

María: - Hola mamá. - Le dió un beso en la mejilla.

X: - Hola hija. - Se dirigió a mi. - Ana, cierto? Me habló mi hermano para avisarme. No te preocupes por nada, quédate el tiempo que necesites. 

Ana: - Así es, un gusto conocerla. Gracias por permitir que me quede un tiempo aquí, son muy amables y estoy muy agradecida.

Elisa - Por favor, háblame de tú, me siento vieja. Me llamo Elisa. Preparé un pay de queso, que no es por presumir pero me quedó delicioso. Vamos siéntense. Platícanos sobre ti Ana.

"¿Sobre mi? Ay no. Tú puedes Ana, no todo lo que digas tiene que ser mentira". - Me senté en la mesa. - " Espero que me estés buscando Cinco". - Pensé.

NARRA CINCO:
Caminé fuera del centro de salud, ya había anochecido y escuché a unas personas hablar sobre un hombre grande y fuerte que era guardaespaldas de un señor dueño de un bar, para quitarme la duda de si era Luther fuí al lugar. A principio no querían dejarme entrar, pero claramente no me importó.

X: - Lo siento, no puedes pasar. No eres mayor de edad. - Me dijo una chica güera.

Cinco: - Mira, no tengo tiempo, déjame entrar, no le hago daño a nadie.

X: - Eres un chico muy obstinado. Eres tierno. - Trató de pellizcar mi mejilla y le doy un manazo.

Cinco: - Ajá, pasaré, espero a alguien. - Entré.

Me senté en una de las mesas de adelante para ver el show de una bailarina mientras esperaba.

Luther: - No le gustará a Ana que veas a chicas bailar en un bar. - Me Susurró en el oído.

Cinco: - Gusto en verte también Luther

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Cinco: - Gusto en verte también Luther.

Luther: - Hasta que te dignas a aparecer, llevo un año aquí. - Se sentó a mi lado.

Cinco: - Lo siento, si? Necesito tu ayuda. El apocalipsis nos siguió, quedan 10 días. - Arrugó la nariz enojado.

Luther: - Me vale, tengo un trabajo, llevo una vida de un año aquí. Si quieres salvar el mundo, adelante, que te diviertas.

Cinco: - No lo entiendes, necesitamos a la Academia Umbrella. Eres el número 1.

Luther: - No no, eso empieza hasta 1989, adivina qué... Estamos en 1963. Adiós.

Luther se fue y me senté a tomar una margarita, pensaba en como convencerlo, traté con Diego, con Luther y ninguno quiere hacer nada. No tenía indicios de Ana y me quería volver loco.
Me levanté y sentí algo en mi saco, había una cinta de vídeo con la fecha de 22 de noviembre de 1963.

RECUERDO:
*Empezaron a disparar y Hazel pone en el saco de Cinco la cinta de vídeo sin que se de cuenta.
Hazel: - Vete!*.
Fin del recuerdo.

Cinco: - Vaya Hazel. Gracias. - Me dije a mi mismo.


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Hola bbys, como andan? Les va gustando? Espero y si

The Umbrella Academy *TIME 2 *Donde viven las historias. Descúbrelo ahora