The Scent Of Destiny

XXX

Al día siguiente desperté un poco más tarde que de costumbre, ya que al no tener que apresurarme para estar listo a tiempo para que Félix me recoja, podría hacer todo más lento.

Luego de desayunar y vestirme, tomé mi teléfono y le envié un mensaje a Hyunjin.

"Hola Jinnie, hoy no pasaremos a recogerte, luego te explico"

Tomé mi bolso y comencé a caminar hacia la parada de autobús.
En la mañana todo parecía distinto, hace mucho que no tomo el transporte público para ir a la escuela, así que es como si estuviese descubriendo todo de nuevo.

Me detuve en la acera a esperar que los autos dejaran de pasar, cuando escuché un ruido a mis espaldas.
Me giré un poco por curiosidad y pude ver una figura masculina sobre una motocicleta a unos tres metros de mi, parecía estar observándome.

Un pequeño grupo de omegas que se encontraban junto a mi lo observaban mientras pequeñas risas escapaban de sus bocas.

—¿Quieres dar un paseo?—preguntó a la vez que levantaba el cristal del casco que cubría sus ojos.

¿Minho?

El desgraciado me observaba fijamente, no podía ver todo su rostro, pero sabía que estaba sonriendo, satisfecho.

—¿Robaste un banco? Se que dijiste que te ocuparías de hallar una solución para nuestro transporte, pero no creí que llegarías tan bajo— dije acercándome.

Rió y pude escuchar a las omegas suspirar.
Mi mandíbula se tenso.

—En realidad es mia, la tengo desde que llegué a la ciudad, es solo que nunca la había utilizado hasta ahora, no me gusta llamar demasiado la atención.

—Pues elegiste un mal grupo de amigos.

—Lo sé, pero ya es tarde para irme de alli—se encogió de hombros—¿vienes o no?¿prefieres ir en un sucio autobús con personas que no conoces o conmigo, el alfa más apuesto de la ciudad?—dijo tendiendome un segundo casco.

—Me pones entre la espada y la pared—dije fingiendo pensar.

—¿No quieres que sea entre la pared y yo?—preguntó mientras guiñaba con un ojo.

Sentí el calor subir hasta mis orejas.

—Creo que el autobús no suena tan mal.

—¡Jisunggie! Era una pequeña broma, no me dejes aquí solo.

—Bien, sólo porque me das lástima iré contigo.

—¡Si! Ten—me tendió el casco—¿necesitas que te ayude a subir?¿llegas o debería alzarte en mis brazos?

—Si continuas diciendo esas cosas te irás solo—dije subiendo a la motocicleta.

—Lo siento, sujetate bien, no quiero perderte—confesó mientras aceleraba.

Me sostuve con fuerza a su cintura.
Sentía la fresca brisa de la mañana golpear mi cuerpo.

Así, llegamos a la escuela, bajo la atenta mirada de todo alumno que nos veía pasar.
Podía verlos hablar en voz baja, algunos hasta nos señalaban.
Idiotas.

Dejamos el vehículo en el estacionamiento y nos apresuramos a ingresar.

La situación en el corredor no era diferente.
Varios pares de ojos descansaban sobre nosotros, aunque no estoy seguro de la razón, creo que la ausencia de Félix y Hyunjin a nuestro lado también tiene que ver.

Ya en el salón, divisé a Hyunjin en su asiento, observando por la ventana.

—Hola Jinnie—dije sentándome.