Capítulo XXXII

2.1K 132 11
                                    

JUGHEAD

—Volviste papi — sonrió — pensé que tardarías más.

— no fue la gran cosa — dije mientras quitaba mi saco y aflojaba un poco la corbata.

— ¿No te fue bien?

— solamente era Scarlet jodiendo como siempre, nada importante.

— ¿Quién es Scarlet? — me senté a su lado y ella se subió a mis piernas.

Suspire — ella es mi ex novia — acaricie su mejilla tratando de tranquilizarla, ya que su rostro cambió de inmediato a uno de preocupación — no te preocupes por eso mi amor.

— ¿Nos volverá a hacer daño papi?

— no, no lo permitiré... ¿Qué te parece si vamos a casa? Ya terminé todo lo planeado para hoy.

— ¡Si!


• • •

Al llegar a casa Betty corrió directamente al sofá, encendió la televisión y empezó a ver uno de sus programas favoritos.

— papi ¿Quieres ver conmigo a My Little Pony?

— Claro, pero primero pediré pizza, no quiero cocinar nada.

Ella asintió y se recostó en el sofá con Blash en sus brazos. Luego de pedir la pizza me recosté junto a ella en el sofá.

— papi ¿Tú me amas mucho?

— no te imaginas cuánto princesa — acomode su cabello y ella besó mis labios.

— Yo también te amo muchoooo, hasta las estrellitas.

— Eso es mucho mi amor — sonreí cuando empezó a peinar mi cabello, siempre lo hace — ¿Le das otro beso a papi?

— ¿muy grande o pequeñito?

— muy grande por supuesto.

Ella río y junto nuestros labios de nuevo. Movíamos nuestros labios coordinadamente y nuestras lenguas tenían una guerra entre ellas. Betty empezó a mover sus caderas en círculos sobre mi provocándome una erección. Mordí su labio inferior y un pequeño gemido salió de sus labios haciéndome reír.

— gracias princesa — susurré sobre sus labios.

— Yo quiero más papi y tú también — dijo presionando sus caderas en mi erección — porfis — formó un puchero en sus labios.

— está bien, solo continua besándome.

Ella volvió a juntar nuestros labios y continuó con el movimiento de sus caderas. Mis manos viajaron a su cintura y poco a poco levanté la blusa de Betty, ella se separó por un momento de mis labios y quitó su blusa junto con su sujetador dejándome ver sus lindos pechos.

Volvió a juntar nuestros labios y con mis dedos acariciaba sus pezones. Sentí sus manos debajo de mi camisa, tocando la piel de mi abdomen. Me senté con ella aún encima para que pudiera quitar mi camisa.

Mis besos pasaron a su cuello bajando hasta sus pechos. Mordí y besé uno de sus pezones, trazando diferentes formas con mi lengua. Luego de darle la atención suficiente pase al otro haciendo lo mismo que con el anterior, mientras que Betty se encargaba de desabrochar mi pantalón.

Su mano se sumergió dentro de mi boxer encontrándose con mi miembro erecto, con sus dedos le dio unos cuantos toques y luego lo saco al aire, liberadome del incómodo jean y boxer. Con su pequeña mano empezó a masturbarme haciendo que un gemido saliera de mis labios.

— princesa... No te detengas.

Ella se acomodó en mis piernas quitándome el contacto que tenían mis manos con sus pechos, se inclinó un poco y esparció un poco de saliva por todo mi miembro, pasando su lengua por mi glande.

El sonido de la puerta hizo que Betty detuviera los  movimientos que hacía con su boca, llevandome a la tortura.

— La pizza llegó papi.

— ignoralo, continúa con lo que hacías princesa.

Ella negó con su cabeza haciéndome gruñir — yo quiero pizza papi.

— está bien — levanté mi pantalón del suelo y busqué el dinero — ten, no demores — ella asintió y se levantó de mis piernas — Betty.

— ¿Qué?

— ¿no olvidas algo? — ella me miró confundida, así que me levanté y tomé mi camisa del suelo para ponérsela a ella — ahora sí, ve.

Ella soltó una pequeña risa y salió perdiéndose de mi vista. Suspire y me puse de nuevo en el boxer sentándome en el sofá.

El olor a pizza invadió mi nariz dándome cuenta del hambre que tengo. Betty apareció de nuevo en mi campo de visión sosteniendo la caja de pizza, la que dejó a mi lado y ella tomó asiento en mis piernas, haciéndome jadear.

Soltó una pequeña risita — lo siento papi, pero tengo mucha hambre.

— Yo igual pequeña, pero duele.

— Luego soluciono tu problema papi. Primero quiero comer pizza.





———————————————



Recuerden votar y comentar

Baby GirlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora