Baby Girl

Capítulo XLV

JUGHEAD

Desperté mas o menos a las 10 am y se sintió un poco feo el no ver a Betty a mi lado o que ella sea la razón por la que despierto.

Con pereza me levanté de la cama para ir al baño y lleve mis dientes y demás. Luego baje las escaleras y fui a la cocina para desayunar algo, lo cual fueron cereales con yogurt.  Mire mi celular en busca de un mensaje de Betty pero no había nada. Tal vez aún duerme, no debo preocuparme.

Mientras desayunaba vi un poco de televisión y mi paz y tranquilidad fue interrumpida cuando tocaron la puerta principal...

Con pereza fui a abrirla y suspire al ver a la castaña frente a mi... ¿Que quiere ahora?

— hola Jughead — dijo con una sonrisa en sus labios. Que gran fastidio.

— ¿Que haces aquí Scarlet?

— vine a saludar y pensé que tal vez podríamos pasar el rato, desayunar juntos y aprovechamos para que conozca a tu nueva novia ¿Que dices?

— sabes cuál será mi respuesta a eso Scarlet. No.

Iba a cerrar la puerta pero ella me empujó y sin mi permiso entro a la casa. Maldije y apreté mis puños. Tengo que controlarme.

— veo que no ha cambiado mucho la casa... Solo unos cuantos adornos — dijo mirando las fotos que tenía en una repisa de Betty y yo — ¿Donde esta tu adorada princesa? Quiero verla y saber que es en lo que tanto te fijaste, las fotos no son suficientes.

— está durmiendo — mentí, ella no tiene que saber que Betty no está en casa — así que ya te puedes ir.

— mhmm ¿Seguro de que me estás diciendo la verdad Jugguie? Porque hace poco me enteré de que te encuentras solo en casa — una horrible sonrisa se formó en sus labios — pensé que me dirías la verdad ¿Acaso te asusta-

— vete de mi casa Scarlet, no quiero oírte mas.

La tomé con fuerza de su muñeca y la arrastre hasta la entrada pero justo ahí ella logro zafarse y yo me queje con rabia. No se por cuánto tiempo logré soportarla más.

— estamos solos en casa Jugguie, podemos hacer lo que sea... Tu princesita no se va a enterar — trato de poner sus manos en mi pecho y yo las aparte de un manotazo.

— no quiero nada contigo, entiendelo.

Ella sonrió y en un movimiento muy rápido se acercó a mí y junto nuestros labios en un asqueroso beso que duró pocos segundos ya que me separé al instante pero lo que más me sorprendió fue...

— ¡Jughead! — escuchar la voz de mi pequeña princesa gritarme — ¡¿Que estás haciendo?!

Yo me gire para poder verla y se me rompió el corazón al ver sus lindos ojitos cristalizados y su nariz roja...

— mi amor-

— ¿Quien es ella? — dijo molesta pero su voz se escucho quebrada.

— oh cierto, aún no me conoces— me interrumpió Scarlet antes de que pudiera hablar — soy Scarlet García — ella me hizo a un lado para quedar en frente de Betty y ofrecerle su mano.

Me sorprendió el ver tanto odio en los ojitos Betty cuando miraba a Scarlet, nunca la había visto así.

— ¿Por qué se estaban besando? — dijo mirándome a mi.

— mi amor eso no-

— deja de mentirle Jugguie y dile a la pobre niña la verdad... Que aún me sigues amando.

— ¿Que? — dijo Betty con su voz quebrada.

— no le creas princesa — trate de acercarme pero ella se alejó — mi amor...

Ella tomó su mochila la cual había dejado en el suelo y corrió por las escaleras sin dejar que le diera alguna explicación... Justo tenía que pasar esto.

— tu — dije con molestia — ¡tu planeaste esto!

— claro que sí Jugguie ¿Acaso no recuerdas cuando te dije que los iba a hacer sufrir?

Aprete más mis puños y con fuerza la empuje fuera de la casa.

— no quiero volver a verte cerca de mi casa Scarlet y te advierto de una vez, esto que hiciste tendrá consecuencias.

Dicho esto cerré la puerta con fuerza dejándola con la palabra en la boca. Me apoye sobre la puerta y solté un gran suspiro tratando de tranquilizarme... Con desespero despeine mi cabello y corrí por las escaleras para ir a la habitación de Betty.