JUGHEAD
Cuando desperté lo primero que escuche fue el ruido de la televisión y vi a mi princesa a mi lado tomando su biberón. Pase mi brazo por su cintura y escondí mi rostro en su cuello, sus dedos tocaron más cabello y empezó a jugar con él.
— ¿Estás despierto papi? — murmuró.
— si mi amor.
Dirigí mi vista a la pantalla y vi a los muñequitos animados. La princesita Sofía.
— ¿Quién preparo tu biberón? — pregunte en un susurro.
— Cheryl.
— ¿Por qué no me despertaste, mi amor?
— no te deje dormir mucho papi y no quiero que estés gruñón conmigo — Yo sonreí y dejé un dulce beso en su mejilla.
— eres la princesa más linda del mundo.
— ¿Soy tu princesa?
— ajam, mi princesa.
— ¿No hay nadie más? ¿No tienes otra princesa?
Yo fruncí mis cejas y mire sus lindos ojitos.
— obvio no hay nadie más, solo tú mi amor.
— ¿Seguro? — preguntó con su voz quebrada.
— si mi amor, super seguro. Solo te amo a ti.
Bese sus labios y ella sonrió.
— ¿Por qué me preguntas eso? ¿Sucede algo?
— no papi, solo quería saber — ella desvío su mirada y yo suspiré.
Se que no me va a decir y prefiero no insistir, luego se pone mal y ya hemos tenido demasiado con lo de anoche... No me gusta verla así.
Bese su frente y me levanté.
— ¿Tomamos un baño de burbujas? Creo que lo necesitamos, princesa.
— SI — dijo con emoción y alzó sus brazos para que la cargara
Luego de preparar la tina y deshacernos de nuestra ropa, ambos entramos a la bañera. Betty se recostó en mi pecho y cerró sus ojitos.
— te amo demasiado papi, hasta las estrellitas — dijo sacándome una sonrisa.
— yo te amo mucho más, preciosa.
Cerré mis ojos y rodee su cintura con mis brazos para acariciar la piel de su abdomen.
Luego del baño, ambos nos organizamos y bajamos para desayunar. Cuando llegamos al comedor nuestros desayunos ya se encontraban servidos y Betty se puso tan feliz al ver su plato que traía figuritas.
Extraño cocinar con mi princesa...
Me senté en la silla y Betty se sentó en mis piernas.
— ¿No irás a tu silla, mi amor?
— quiero contigo papi, así es más bonito desayunar.
Ella beso mi mejilla haciéndome sonreír y luego ambos empezamos a comer entre risas y algunos besos, solo hasta que Cheryl y Toni aparecieron.
— buenos días — dijeron ambas.
— hola — saludo mi pequeña con una sonrisa.
— ¿Ya estás mejor, Betts? — preguntó Cheryl.
— si, mucho mejor.
Ella se apoyó en mi pecho y dejó un pequeño beso en mi cuello.
Toni prefirió ignorar nuestra conversación y fue hacia la cocina, mientras que Cheryl tenía una expresión muy seria.
— ¿Sucede algo, Cheryl? — pregunté.
— necesito hablar contigo pero a solas — Betty formó un puchero con sus labios — lo siento linda.
— papi y yo nos decidimos todo.
— lo sé pero no siempre puedes estar en las conversaciones de tu papi... Esta será una conversación de adultos.
— ¿Como la de los señores aburridos, papi? — me preguntó a mi y yo asentí — oh... Entonces iré a jugar a mi cuarto — ella dejó un corto beso en mis labios y se levantó de mis piernas — te amo papi.
— yo te amo a ti.
Ella sonrió y luego se fue corriendo por las escaleras, dejándome solo con Cheryl.
— ¿Podemos ir a tu oficina?
— si.
Me levanté y fui hacia ese lugar al que no entro hace mucho tiempo, todo gracias a Betty. Ambos entramos y me senté en el largo sofá con Cheryl a mi lado.
— ¿Y de que quieres hablar?
— ¿Por qué no me dijiste que los problemas con Scarlett continúan? — dijo frunciendo sus cejas.
— no quería meterte, suficiente tengo con qué Betty este involucrada.
— ¿No quieres que te ayude?
— no Cheryl, no quiero ponerte en peligro... Además ya lo estoy solucionando.
— a mi no me parece que lo estés solucionando.
Suspiré y pase mis manos por mi cabello, frustrado. Ella tiene la razón, siempre la tiene.
— y al parecer a Betty le está afectando demasiado.
— lo sé, cada día anda más insegura y no me gusta verla así, no me gusta que este mal.
— la proteges mucho jughead, no te despegas de ella ni un segundo.
— ella necesita atención Cher...
— y tú espacio ¿No crees? ¿No te molesta estar todo el tiempo con ella?
— no, me gusta estar con ella.
Cheryl suspiro y cerró sus ojos por unos segundos.
— volviendo al tema de Scarlett, te voy a ayudar, no sé cómo pero te voy a ayudar — ella tomó mis manos y me regaló una linda sonrisa — haré todo lo que tú me digas y saldremos de esto juntos ¿Si?
— Cheryl, no quiero que te metas en esto...
— y me quedaré acá en tu casa, podré pasar tiempo con Betty y así tú te distraes un poco y estás contigo mismo, te hace falta.
— dios, eres tan terca, nunca aceptas un no.
Ella río y me abrazó.
ESTÁS LEYENDO
Baby Girl
Teen FictionUna niña de tan solo seis años pasa por un gran accidente automovilístico junto con su familia, donde solo ella sobrevive. Diez años después ella decide escapar de esa casa de tormentas donde vivía y al hacerlo se encuentra una luz de esperanza por...