Capítulo LVI

1.2K 100 9
                                    

BETTY

Era de noche y papi y yo estamos en nuestra habitación, el está mirando sus celular mientras que yo trato de encontrar algo para ver en el televisor.

Fruncí mis cejas y mordí con fuerza mi chupete al ver que solo habían programas de noticieros y esos aburridos documentales. Apague la pantalla y me subí a las piernas de papi para que me pusiera atención.

— ¿No encontraste nada que ver, princesa? — negué con mi cabeza — ¿Y que quieres hacer?

Saque el chupete de mi boca y lo deje sobre la mesita de noche para hablar.

— no se papi — me apoye en su hombro y levanté mi mirada para ver sus ojitos — quiero que me abraces fuerte papi.

Sus brazos rodearon mi cuerpo y yo sonreí devolviéndole el abrazo. Dejo un dulce beso en mi frente y volvió a tomar su celular y seguio viendo la pantalla.

Me apoye en su pecho y cerré mis ojos escuchando los latidos se su corazón. Su mano subía y bajaba por mi espalda... Acariciando mi piel.

• • •


— papi más — gemí y tire mi cabeza para atrás sintiendo como su lengua se movía más rápido dentro de mi.

Sus manos apretaron con fuerza mis muslos para que no me moviera y yo solo gemía de placer. Lo hace tan bien y en muy poco tiempo llegué a mi orgasmo.

La lengua de papi aún se movía en mi humedad probando todos mis fluidos.

Yo me baje de él y me recosté a su lado tratando de calamar mi respiración. Él se apoyo en su codo y acarició mi mejilla con mucha delicadeza.

— ¿Te gustó princesa?

— si papi, fue asombroso.

Él sonrió y dejo un pequeño beso en mis labios y luego fue bajando por mi cuello

— ¿Y quieres más princesa?

— si papi.

Él hizo que yo me girará quedando boca abajo e hizo que mi trasero quedará un poco levantado, sentí sus manos pasar por la piel de mis nalgas y ahí me di cuenta de lo que quiere hacer.

— ¿Puedo hacerlo princesa?... Por favor.

— está bien papi, hazlo.

Sentí la punta de su miembro en mi entrada y como entro de una sola estocada haciéndome gemir muy fuerte y a la vez como empezaba a azotar mi trasero.

— ¿De quién eres princesa? — dijo aumentando sus movimientos.

—soy tuya papi — el azotó de nuevo mi trasero y yo gemí — ¡más papi, más!

En la habitación solo se escuchaban nuestros gemidos, los azotes y el sonido de nuestros cuerpos chocar.

— ¡papi! — gemí fuerte dándole aviso de que había terminado y a los pocos segundos un fuerte gruñido salió de su garganta y sentí como sus fluidos se esparcieron en mi interior y como sus movimientos fueron más lentos.

— no te muevas princess — dijo cuando salió de mi interior y se bajó de la cama.

Yo obedecí y mientras eso sentí como el semen se iba deslizando por toda mi humedad, solo hasta se sentí un pañito húmedo limpiarme y como jughead esparcía una crema en la piel de mi trasero.

El colchón se hundió a mi lado y esos lindos ojitos azules entraron en mi campo de visión haciéndome sonreír. Se ve tan lindo asi después del sexo, sudoroso y sus mejillas muy sonrojadas.

— me gustó mucho papi — susurré.

— a mi también, mi amor... ¿No fui muy duro contigo? ¿No te duele nada?

— no papi, estoy bien.

El suspiro — están muy rojas... — dijo refiriéndose a mi trasero — ¿Segura de que no te duelen?

— ya te dije que no papi, mejor vamos a dormir. Estoy muy cansada.

El soltó una pequeña risa y se acomoda entre las espumosas almohadas y yo sobre él. Cubrió nuestros cuerpos con una delgada sábana y dejo un beso en mi cabeza.

— te amo papi.

— yo te amo a ti mi amor.







Baby GirlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora