Invisible Thread || NamMin

Thirty-five threads: Llanto de cansancio

—Recuérdame que haremos, estoy confundido.

—El espejo es un regalo que le di hace milenios. No sabe que funciona como portal—explica Taehyung—. Como todo en este mundo, se sustenta con su energía vital. Debemos cruzar todos a la vez para que funcione. De otro modo, se dará cuenta e irá a ver qué sucede.

— ¿Qué te asegura que no lo sepa ya? —dice Jungkook preocupado—. Todo está lleno de arañas. Tú mismo lo dijiste.

—Aquí no, porque Yoongi no quiso. Hemos cruzado por los espacios donde ellas no tienen permitido transitar—responde Taehyung y Namjoon arruga un poco la cara—. ¿Qué?

—Sigo pensando que deberíamos fingir que no entramos, ir a saludar y decir que pretendemos. Hacerlo todo así es-

— ¿Convencerlo de qué? Ya me dijo que no piensa dejarme salir de aquí. E-es triste, pero él no deja más alternativa a que le mientan. —Reconoce Yoongi y Namjoon sacude la cabeza.

—Ser sincero nunca está de más. Sobre todo de ustedes dos—Señala a Taehyung y Yoongi—. Sobre todo TÚ—Enfatiza y Taehyung blanquea los ojos, aquí va de nuevo—. Es tu mejor amigo, es tu hermano, fue tu amante. Dile la verdad, habla con él, arregla las cosas, haz algo que no parezca seguir en dejarlo aquí abandonado a su suerte.

— ¿Qué quieres que le diga? ¿Qué me quedo? Es una mentira más que no podré sostener.

—Literalmente será un día de la existencia de Hoseok sin ti, dudo que ni siquiera a él le duela tu ausencia. —Hoseok ríe por la nariz. Eso es cierto.

—Es tardarnos mucho—reclama Jungkook—. Ya tenemos la oportunidad de irnos rápido sin tentar la suerte o un imposible ¿Por qué te importa tanto?

Los cuatro lo miran fijamente con esa pregunta en la mirada: ¿Por qué Namjoon molesta tanto con lo mismo? Literalmente no tiene relación ninguna. Es el menos involucrado en todo esto. Está fuera de lugar de alguna manera. Namjoon se cruza de brazos. Totalmente vendados y así evita que los hilos lo molesten o duelan.

—Porque no soy una mierda de persona. Ya sabemos lo suficiente y quitado aquella vez... No nos ha hecho daño. A nadie ¿O sí? —Yoongi niega. En realidad, aparte de lo escalofriante, no sufrió daño ninguno. Ni siquiera hambre o frío—. Salimos, vamos a la entrada, saludamos, pedimos, continuamos. —Resume con facilidad.

—Salimos, vamos al espejo, se acabó el problema—Contradice Jungkook—. Bien, tengo hambre. Andando. —Carga a Holly y la mete en un bolso. Taehyung levanta las manos.

—Son mayoría a favor de simplemente irnos.

—Hoseok, ayúdame.

—Yo también creo que deberíamos hablar—opina pensativo—. Al menos suavizar que nos vamos.

—Eso lo arreglo después, yo, a solas, con ustedes en sus casas.

Namjoon se aprieta la cara. Que insufribles son. Sea por haber tenido solo conversaciones banales a mitad de la noche, entre sueños y cosas así, está seguro de que podría convencer a Jimin de dejarlos irse. Sin tener que mentirle en la cara o cumplir el peor temor que tiene: ser abandonado mientras duerme cuando se lo prometió quedarse. Es cruel. Muy cruel.

No pone empeño en apurarse para ir al tercer piso. Las arañas dormidas por doquier le causan ligera ternura. Pues es literalmente un montón de bebes tirados por doquier. Llegan al tercer piso, avanzan hasta donde Yoongi les indicó que fueran. Es muy tarde, a poco de ser el próximo día y por vigilancia de Taehyung con un ave, Jimin duerme.

Pone la mano sobre el espejo y este cobra un brillo intenso.

—Bien—Sonríe satisfecho—. Ahora, recuerden, al mismo tiempo. Cuento hasta tres y cruzamos—En el espejo de vislumbra el departamento de Taehyung y Hoseok—. Pon el bolso de lado. Que ni siquiera eso esté atrás. —Jungkook acomoda el bolso y Holly chilla sin entender qué pasa.