–¡Una maldita multa!
Harry no se atrevió a levantar la mirada, incluso Altais se había ocultado en el asiento de atrás junto a Malfoy.
Andromeda había tenido que ir a buscarlos al Ministerio en el auto de su esposo, y no había sido muy agradable. Nymphadora se había mantenido callada durante todo el trayecto. Y a pesar de que el regaño no iba para él, Sirius se mantuvo callado junto a Harry, mirando hacia abajo igual de apenado que él.
–Él me estaba acusando de...
–¡Draco, no me importa! ¡El Ministro no es alguien a quien debas levantarle la voz! ¿No lo entiendes?– dijo algo desesperada, sin quitar la mirada del camino. Remus iba a su lado en el asiento del acompañante, con el ceño fruncido mirando hacia delante, Harry imaginaba que lo hacía para que Andromeda no chocara. Ella no había dejado que nadie más conduciera, ni siquiera Remus, el mas responsable de ahí.
Malfoy se cruzo de brazos, girandose hacia la ventana. Harry pensó en que le haría la ley del hielo a Andromeda por el resto del camino. Tenia sentido para él. Altais se acurrucó en el regazo del rubio, dispuesto a ignorar a Andromeda también.
–Mamá...
–Tú debiste detenerlo...
–¡Lo detuve!– Andromeda detuvo el auto, girando en el asiento para poder mirar a todos los que iban en la parte de atrás, haciendo callar a su hija.
–¡Entonces explícame porque confiscaron su varita!– dijo apuntando a Malfoy, que infló sus mejillas bastante molesto.
Dora no respondió, se cruzo de brazos y, al igual que su primo, miro hacia la ventana con los ojos vidriosos, ignorando a su madre.
Andromeda negó, volviendo su vista al frente, dispuesta a seguir conduciendo hasta Grimmauld Place, lugar donde de quedaba Harry hasta que sus padres aparecieran.
–No lo entiendo...– murmuró, quitando un mechón de cabello que caía por su frente –No te eduque de esa manera, Draco. ¿Gritarle a una persona bastante importante en el Ministerio? No puedo creer lo que has hecho. Estoy tan decepcionada de ti. Y Dora..., tú no debías apoyarlo en esa estupidez.
–No lo apoye, solo lo defendí, porque por si no sabias, lo estaban acusando de algo inaceptable.
Andromeda no respondió, mordió su labio inferior y siguió conduciendo. Y Harry se sintió muy incomodo cuando vio a Malfoy tapar su boca, sin despegar su mirada de la ventana.
Cuando llegaron a Grimnauld Place, Harry, Sirius y Remus bajaron en silencio. Malfoy ni siquiera había volteado a mirarlo, y Harry prefirió creer que se había dormido en el camino. Dora le sonrió como despedida, y Andromeda susurró un suave adiós antes de volver a marcharse.
–Espero que Draco pueda explicarle mejor antes de recibir un castigo– dijo Sirius, entrando a la gran casa Black. Harry estaba seguro de que nunca podría acostumbrarse al pequeño cosquilleo que le daba el hechizo protector. Remus le tomo por los hombros, llevándolo directamente hasta su cuarto.
–Necesitamos descansar, Harry– dijo, empujándolo suavemente hacia su habitación –¿Tienes hambre?
Harry negó, y con una silenciosa despedida, Remus salió de la habitación.
Se sentó en la cama, pensando en todo lo que había sucedido ese día. Definitivamente había sido uno de sus días más extraños, y eso ya era decir mucho.
Se vistió rápidamente, deseando poder dormir y que su cabeza dejara de doler. Pensó en que Malfoy no había comido mucho la noche anterior, y que tal vez por estar enojado con Andromeda no comería. Pensó en que tal vez se habría quedado dormido en el auto y que Andromeda no lo despertaría para dormir cómodamente en su cuarto, un castigo por haberse defendido del Ministro.
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Maybe
Fiksi PenggemarIr a Hogwarts era su sueño. Soñaba crecer y convertirse en auror como su padre. Pero había un problema, era un Potter. Y un Potter no se caracterizaba por tener buena suerte. Fanfiction del universo de Harry Potter. Harco/Drarry AU. DracoRavenclaw! ...