Baby on board.

Capítulo 24

— Ray, esta vez si te pasaste.

— Ya deja de quejarte, ni fui tan rudo.

— ¿No fuiste tan rudo? ¡Me duele el maldito trasero!

Ray soltó una risita y continuo preparándole el baño a su chico, mientras que este seguía quejándose, tirado en la cama, boca abajo con el culo al aire debido al dolor.

— Ray — Se quejó de nuevo haciendo pucheros. El castaño salió del baño para ver a su novio en la cama, en una linda y sumisa posición.

— No sé por qué chillas, eras tú el que quería sexo rudo — Se cruzó de brazos, recargándose en el umbral de la puerta.

— Si, pero tampoco era para que me destrozaras el culo — Expreso mirándolo con odio. Ray volvió a reírse.

— ¿Seguro? porque yo recuerdo claramente como lo pedias, si recuerdo que decías "Oh si Ray, dame más duro papi" — Fingió gemidos al mismo tiempo que hacia expresiones sexuales con su cara. Eso le costó un almohadazo por parte de su novio.

Abrió sus ojos luego de recuperarse del impacto en su cara, y miro a su novio quien ya se encontraba sentado, con los brazos cruzados, aun manteniendo su puchero. Ray le sonrió y se acercó, subiéndose rápidamente encima de él, recargando sus manos a cada lado de sus caderas para no dejar caer su cuerpo.

— Me duele mi traserito — Murmuro como niño pequeño. Ray le hizo un gesto de tristeza fingida y le dejo un tierno beso.

— No me voy a disculpar por complacerte — Soltó con burla al mismo tiempo que movía sus labios provocativamente por el rostro del rubio pero sin llegar a tocarlo.

— P-pues v-vas a tener que d-dejar de complacerme, g-gracias a eso es que terminamos embarazados — Balbuceo perdiéndose en el toqueteo de su novio. Ray soltó una risa descarada y termino por conectar sus labios en un apetitoso y apasionado beso.

— Vamos princesa, te prepare el baño — Murmuro muy cerca de sus labios de manera sexy.

— No creo que pueda caminar — Lo rodeo por el cuello — Y no soy una princesa — Ray rodo los ojos de forma divertida, se bajó de encima de Ray, bajándose de la cama, luego lo tomo en brazos, cargándolo estilo nupcial.

— No eres una princesa, entonces ¿qué tal una reina?... Si eres toda una reina del drama, ese será tu nuevo apodo ahora —Sonrió mientras los conducía hacia el baño.

— Aquí la única reina del drama eres tu — Refunfuño.

— ¿En serio? pues estos últimos meses me has robado el papel — Se burló, luego lo bajo dejándolo en el alfombrado suelo del baño (adquisición nueva que había comprado después de aquel incidente)

— Bien, aquí tienes todo, yo iré al otro baño.

— Espera — Lo detuvo antes de que se fuera — ¿No te bañaras conmigo? — Pregunto tiernamente, colocando ojitos de cachorro y moviendo sus pestañas.

— No, no conozco esa carita, sé que si entro ahí contigo haremos de todo menos bañarnos — Henry sonrió con descaro.

— Vamos, no seas aburrido — Se acercó seductoramente y lo rodeo por el cuello.

— ¿No te dolía el trasero? — Soltó una risita mientras lo tomaba por la cintura. Henry rodo los ojos.

— Eso es el pasado Ray, vine el presente — Expreso con fastidio pero a la vez en broma, luego lo beso. Ray sonrió en medio de este, le correspondió el beso solo para soltarlo unos segundos después.