5 - La Promesa Inútil

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K.

El deslumbrante brillo del sol se coló a través de las cortinas de mi ventana, llegando a mis ojos – por lo que desperté irritada –. Valerio permanecía dormido aún y en ese estado de quietud me mantuve pensando – sí, otro ataque de conciencia – lo lógico y correcto sería que apoyara a mamá en todo lo que hace, y para ello debía comenzar a estudiar algo o comenzar a ganarme la vida de algún modo, no es que fuera necesario o imprescindible, pero aún así, siento que no contribuyo en nada, y es frustrante, más para alguien como yo, que crecí viendo como mi madre nunca se detuvo a descansar, estaba siendo egoísta y …

Buen día, Fiona… – dijo Val finalmente despierto – déjame adivinarlo ¿pensando en tu futuro?

Buen día, Shrek, y sí…

Mujer del diablo, que cuando estemos listos haremos lo correcto, te lo he dicho 498 veces.

¿Y cuándo lo estaremos? – respondí cansada.

Algún día – dijo encogiéndose de hombros – por el momento piensa en el presente, ¿recuerdas que ayer tuvimos un encuentro con Edward Cullen?

Sí, sí, sí – dije golpeando levemente mis mejillas para alejar momentáneamente esos pensamientos y concentrarme en lo que habíamos visto ayer – ¿y bien?

Bien nada, tenías razón, una siesta es lo mejor para calmarse de algo así, ya hoy vuelvo a ser el neutro Valerio Marío Polo – nuevamente con sus comparaciones impredecibles – y pienso que lo mejor es que ignoremos eso, digo, es un príncipe, y esos seres tienen cada fetiches más raros…

Cierto

Así que hagamos una promesa – añadió mirándome finalmente.

¿Dedo meñique? – sí eramos muy infantiles cuando nos lo proponíamos.

Sí, como quieras… dijo torciendo los ojos, pero finalmente tendió su dedo más pequeño, y cuando estuvieron ambos dedos entrelazados – promete que nunca nos volveremos a poner en peligro como ayer – lo miré extrañada.

¿Te caíste de la cama anoche o qué? Si mal no recuerdo el culpable de todo eso fuiste tú.

Recuerdas mal, tú fuiste la que me mostró los autos – contuvo su risa.

Bien, no volveremos a ir a la mansión Reisen.

Prometido.

Tal y como cualquier otra promesa, esta, siempre estuvo destinada a romperse, pero eso era algo que nosotros ni siquiera comenzábamos a sospechar en ese momento.

...

Me voy – musitó Val con agonía en su rostro y su voz.

Es muy temprano aún…

Ya pasan de las 12…

¿Y?

Tengo un papel que cumplir – añadió por lo bajo.

¿Quieres que te acompañe?


No, estaré bien – agitó un poco la cabeza para alejar sus malos pensamientos – después de todo creo que finalmente encontré mi profesión…

¿Ah sí?

Sería un perfecto actor…

¿Cómo no pude darme cuenta antes Valerio Pitt? – dije exagerando mis gestos y él me secundó en una risa, antes de ponerse de pie y caminar hasta la puerta.

Te escribiré más tarde, Kiera Jolie – cerró finalmente la puerta tras de sí.

Y ahí iba, nuevamente a su batalla contra la verdad, Valerio siempre me pareció una persona fuerte, mucho más que yo – descartando el peligro mortal de anoche – así que sé lo que piensas, porqué si es tan fuerte no le cuenta la verdad a su familia y termina con esa visible agonía, lo sé porque pensaba igual, incluso le propuse venir a vivir a mi casa, mamá jamás se opondría a eso, pero – siempre hay un pero ¿verdad? – poco después de la partida de Edward, su madre Sofía, que aunque no lo aceptó completamente, tampoco era tan radical como su padre, el punto es que a los días de su salida de casa, ella comenzó a sentirse muy mal, sumamente nerviosa, desatando episodios muy raros, se comía las uñas, caminaba por horas de un lado a otro en su casa, y muchas cosas más que Lerio jamás me contó, todo esto fue empeorando a tal grado que terminó internada en una clínica de salud mental y su padre culpó aún más al pobre Ed, hasta que a los meses finalmente mejoró y le permitieron volver a casa.

Dirás que con eso es suficiente para comprender la actitud de mi amigo, pero lastimosamente no lo fue así, a las semanas de que Sofía estuviera en casa, Edward – que al parecer se enteró para ese entonces – se apareció, contando con que para esas fechas Albert Miller estaría en su viaje al infierno, pero no fue así, y al verlo – decir que se formó el apocalipsis fue poco – se lanzó a él con tal furia que cualquiera pensaría que lo mataría, lo golpeó tanto que la sangre corrió y lo sé bien porque yo estuve ahí, Val corrió a separarlos pero vamos, ese hombre gigante es un oso polar, empujó al menor con tal fuerza que cayó de espaldas al suelo quejándose del dolor, mientras solo se escuchaban mis gritos, esos que finalmente llamaron la atención de Sofía y cuando salió de casa y vió la escena quedó paralizada por unos segundos, pero luego llevó su mano al pecho e hizo una mueca de dolor, y finalmente cayó al piso, yo corrí a ayudarla llamándola varias veces pero no respondía, hasta que al parecer el animal que golpeaba a su hijo se percató y antes de venir a socorrer a su esposa le dijo:

¿Ves lo que causas con tus perversiones? – señalando a la señora.

Suspiré de ira y rabia cuando dijo lo siguiente:

Y tú, ya puedes ver lo que te pasará si terminas como él – Val lo miró con miedo, y yo lo comprendí, Edward estaba tendido en el suelo llorando mientras hacía un esfuerzo por levantarse y ver a su madre.

De las peores escenas que he vivido sin duda fue esa, y alguien de entre los que observaban la situación – pues obviamente habría varios chismosos, que no movieron ni un solo dedo para ayudar – llamó una ambulancia, que cuando llegó Albert me apartó y tomó a su esposa en brazos y la montó en ella, desapareciendo y, con él, todo el peligro, de inmediato Val y yo corrimos a ayudar a Edward, limpiamos su rostro dentro de casa, lo más rápido que pudimos para evitar que su padre regresara y lo viera nuevamente ahí, le propuse quedarse en mi casa esa noche pero terminó negándose, y llamó un taxi para finalmente desaparecer de su casa y de este pueblo.

...

Yo estaba tendida en el suelo – aburrida – mirando el techo, manía que heredaría de mi amigo, hasta que la puerta abierta y el sonido de un continuo taconear me haría levantarme, y cuando lo hice, ahí estaba ella, la diosa guerrera, Lilith Harper, mamá.

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Buen día chiquillos de Wattpad
Aquí tenemos el capítulo 5
Donde conocemos un poco más a Valerio porque es necesario comprender esto para más adelante.

Y al final llega alguien muy importante para Kiera, su mamá.

Saludillos x TRES

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(人 •͈ᴗ•͈)

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