55- la mente y el corazón

6.8K 794 431
                                    



Canción: I hate you, I love You.

Mis amores, una vez más me tienen aquí, después de perderme a mi misma. Estuve de vacaciones y eso me robó mucho tiempo, por eso es que estaba actualizando mucho, por esa razón estaba editando otros libros, porque sabía que esto llegaría.  Cumplo años el 13 de agosto, y quiero que sepan que ustedes son mi mejor regalo.

Gracias por estar para mi, por esperarme y entenderme. He estado bien como he estado mal, pero estoy aquí y es lo importante. Tú estás aquí.

Saben que mi sueño es tener mis libros en físico, y es por eso que estoy luchando, por llevarles un trozo de mi vida en sus manos y compartirlo con ustedes.

Las amo.

Ahora si, dedico este capítulo a ustedes, mis abejitas.

Reto: darme como regalo tu presencia y apoyo. 🙏🏻♥️
—————-

El temor es mi dueño, que clava una y mil veces mis sentimientos. Tengo la mirada sobre William, quien hace un momento ha descubierto las marcas y huellas en mi piel. No quisiera mentirle sobre lo que estuve haciendo toda la noche; pero nosotros creamos un pacto de confianza, donde nuestra amistad exige la comunicación de ambos.

¿Cómo podría explicar lo que sucedió sin sentirme tan mal?

—William —susurro con la voz temblorosa. Apenas he podido mencionar su nombre correctamente.

—Descuida, se supone que tendríamos confianza —soltó, y una sonrisa se asoma después de decirlo.

—Es que... —la voz de me escapa y trago seco, no puedo decirlo.  Camino hasta el sofá y me siento de golpe. William me ha seguido y hace lo mismo, se ha sentado a mi lado llevándose el último suspiro de mi parte.

—No pienses que debes darme explicaciones de lo que hiciste, solo me he sorprendido por como  tienes tu espalda. Estuve toda la noche preocupado, pensé lo peor, y ahora que te veo así me pregunto que habrá pasado.

No quiero mentir y ocultarle nada, pero en este momento me está doliendo tener que aclarar las cosas. William no se merece que yo lo haga confundir más de la cuenta.

Levanto la mirada, encontrando en el azul de sus ojos, dudas, y más dudas. Me duele verlo, porque William ha sido un gran amigo tanto como un amante. Ha sido un gran hombre y me ha demostrado cuánto me respeta y me admira.

«Maldición, lo he estado haciendo tan mal. No sé en que momento todo se descontroló en mi vida» pienso para mi, con el corazón estrujado.

—Descuida, Will, estoy bien —sonrío para disimular mi dolor y no mostrarle lo mal que estoy ahora mismo. Will toma mi mano y con la otra la acaricia, pero su ceño se juntan con un toque de confusión.

—Creo que ha sido todo menos una pelea. Tranquila, puedes confiar en mi, igual creo que sé lo que anoche pasó, y no me incómoda ese pensamiento, pero si me sentiría mal de que me mientas —dice y su voz cada vez es más suave.

De la nada ya he soltado su mano y la he llevado hasta mi frente, frotando nerviosa sin saber que hacer y decir. El problema no es que yo tenga que decirle que tuve sexo, el problema es con quién. Si bien no es de su incumbencia que yo le cuente con quien estuve, sé que de alguna forma lo sabría o se quedaría con las dudas.

—William, ¿qué has pensado? Digo... ¿qué es lo que tienes en mente?

Una corta sonrisa se le escapa y parece estar tranquilo. William Deja escapar un leve suspiro y dirige esa mirada tan hipnotizante sobre mi. De pronto observo el pequeño detalle de sus labios mojados, cuando su lengua les humedece.

Conquista a mi novioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora