Todas las chicas soñamos con un príncipe azul, por más rudas o desinteresadas que seamos siempre va a haber esa pequeña esperanza de encontrar a alguien que nos ame tal y como somos. Pero ojo, buscar a ese "alguien" especial no significa dejarnos tratar como...mierda, nunca hay que rogar por amor, tampoco les digo que dejen de luchar por él, por que dejar de luchar por el sería estúpido. Debemos perseguir nuestros sueños, mientras más nos esforcemos más grande será su valor para nosotros. Las chicas buscamos a alguien que nos haga feliz, desafortunadamente llega alguien, ese alguien nos ilusiona, nos hace pensar que es el indicado, y cuando menos lo esperamos caemos, caemos por que el supo perfectamente que hacer para engañarnos, algúnas se quedaran a mitad del camino, otras no querrán esperar, otra más querrán esperar...Como Cristina.
Cristina era una chica normal, siempre responsable, recta, exitosa, inteligente y madura. Ella no "perdía el tiempo" pensando en ridículas historias de amor, en un príncipe azul, en besar sapos, en perder una zapatilla o ser despertada por un beso de amor verdadero, aquello no llamaba su atención, no lo había hecho hasta que un día, en su segundo año de preparatoria un chico llegaría a poner su mundo de cabeza. Hay que tener en cuenta que el destino siempre nos tiene una que otra travesura preparada.
Era un lindo lunes del mes de noviembre. Cristina estaba puntual, como siempre, en el colegio, pasó a su caasillero, tomó las cosas necesarias y se retiró tranquilamente. Fue al aula correspondiente a Ciencias Sociales y tomó el primer asiento disponible al frente del salón.
Después de 30 minutos de clase, dictados infinitos y cerebros echando humo el profesor pidio completa atención, lápices abajo, cuadernos cerrados y vistas al frente.
-Jóvenes.-Comenzó el profesor Jones, carraspeó un poco y continuó.- Como sabrán cada mes hay un proyecto especial, esta vez es algo muy simple. El típico bebé. -Todos los alumnos bufaron cansados de los proyectos del señor Jones.
-¿Va a ser algo individual o en parejas?-Preguntó Cristina.
-En parejas señorita Cristina.-El profesor le brindo una cálida sonrisa. -Las parejas serán formadas en la siguiente hora. Pueden retirarse señores. -Todos se pusieron de pie y comenzaron a salir.
Después de la hora del almuerzo Cristina se dirigió de nuevo al aula de Ciencias Sociales, depositó la basura en el contenedor y paro en seco, alguien le miraba y para ella había sido inevitable detectarle. Era un chico, pelirrojo, alto, guapo. Ese chico capto su atención así, nada más.
El chico estaba igualmente de pie, mirándo a una bella chica, su corazón latía desbocado, sus ojos se iluminaron al verla pasar frente a él. A eso se llama amor a primera vista. Esa chica era preciosa, esa pestañas largas y definidas, ese cabello rizado y negro brillaba con ta intensidad, su ojos le transmitían tranquilidad, ella era bellísima.
El timbre sonó sacándo a los dos jóvenes de ese embelecedor transe. Los dos tomaron caminos distintos sin saber que se encontrarían más adelante. Como había mencionado yo, una inexperta en la vida, una inocente escritora que sólo relata la historia de dos locos enamorados, pero no necesito ser experta, el primer poema no fue escrito por un poeta, si no por un loco joven enamorado, al igual que yo, está maravillosa historia es sólo relatada por una escritora joven y enamorada. Una escritora que juega con el destino, mis más bellos deseos se encuentran aquí, esperando que Cristina pueda encontrar al chico de ojos verdes mirándola igual de enamorado.
Pero el tiempo pasa, la chica y el chico no mantenían mucho contacto. Un día Mike, así se llama el chico, caminaba por la calle y vio a Cristina, pareció no importarle demasiado y siguó su camino a casa.
-Es que es alto, es guapo, es perfecto...-Explico Cristina a su madre.
-¿Has hablado con el?-Cristina negó avergonzada pues nunca había hecho el intento. -Hablalé, tal vez también le gustes a él.
Cristina había dado mil vueltas en la cama pensando en aquellos ojos verdes, mañana hablaría con el. Lo haría.
Mike no podía conciliar el sueño, su cama estaba hecha un desastre, parecía que un rmolino había pasado por ahí, Mike había estado dando mil vueltas, entonces decidó hacer la locura más linda de su vida, se escabulló por la ventana de su habitación, se colocó una chaqueta y comenzó a caminar. 10 minutos después se encontraba recogiendo algunas rocas del pasto de aquella casa especial, tomó las más pequeñitas, las que menos dañarán la ventana.
Cristina caminaba de un lado al otro en su habitación cuando unos pequeños golpecitos en la ventana la distrajeron. Abrió la persiana y vio una sombra en el césped, abrió la ventana y con la lámparilla de su móvil pudo reconocer al chico, su corazón se acelero, su alma salió de su cuerpo por un momento y los nervios se dispararon al mil.
-¿Qué haces aquí Mike?-Preguntó Cristina en murmullos.
-Vine a verte.-Dijo Mike y localizó la escalera al lado de la ventana de Cristina, subio con precaución. Cuando entró a la habitación no le permitió a Cristina decir nada.
La tomó delicadamente por la nuca y la besó, Cristina pasó sus delgados brazos por la cintura del chico y se aferró a sus labios, Mike con su mano libre apretó las caderas de la chica. Aquel delicado pero apasionante contacto había dejado con ganas de más. Esa noche comenzó algo más que una historia de amor.
Con el paso del tiempo el escalar por la ventana se convirtió en una costumbre para Mike, Cristina siempre lo esperaba. Dos años pasaron y la joven pareja parecía enamorarse cada vez más.
Una noche Mike no fue a la ventana de Cristina, Cristina estaba tan preocupada. La media noche era y Mike seguía sin aparecer. La chica de cabello negro ya rendida decidió envolverse, sola por primera vez, en su edredon.
Unos minutos despiués una bella tonada hizo que Cristina se levantara de la cama, abrio la ventana, vio al chico rodeado de compañeros de ckase de Cristina. Todos tenían una letra en la mano mientras Mike interpretaba Happiness de The Fray.
Mike escaló hasta la ventana de la chica e hizo la pregunta que marcaría la vida de ambos por siempre. Se arrodillo en el pequeño espacio de la terraza frente a la chica y tomó la pequeña caja de terciopelo, algunos carteles con letras formaron una bella frase "¿Quieres ser mi esposa?" Decía y justo debajo de esta frase una foto de Mike y Cristina besándose. La madre de Cristina abrazó a Cris y Mike la besó, colocó el aillo en su dedo sabiendo que ella era su felicidad.
Este es el comienzo de la más bella historia de amor. Cristina y Mike.
¡Hola bellezas!!! De este lado Barbs. Amé este imagina, dejé todo mi corazón aquí. Cristina, este es para ti, te amo. Este fue uno de los imagnas que me ha hecho llorar mientras redacto, en verdad, fue hermoso.
¡Cris te amo!!! Y a cada una de ustedes chicas me encantaría darles las gracias personalmente a cada una de ustedes. (Si hy chicos haganmelo saber) Las amo.
Por cierto, ¿cómo les podría llamar a ustedes mis bellas lectoras?
Si tienen algo en mente pliss dejenmelo saber en los comentarios, amaría si le ponen un nombre a...¿ustedes? Bno , entienden esto no... Así como las guapuritas de Yuya, el Holapanoshi de Screamau y eso... Ayúdenme.
¡Ya son 17999 leídos, 613 votos y 43 comentarios!! Eso está chingón.... Las amo (los amo si hay chicos).
Mil gracias.
L@s amo.
Atte: Barbs Frost.