45. Navidad en el aeropuerto {Segunda Parte}

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Niall me miró con las pupilas dilatadas, oscurecidas y con el deseo desbordando a través de ellas.

Sólo se acercó un poco más y posó su mano en mi hombro, con su dedo índice deslizó hacia abajo el tirante de mi vestido e hizo lo mismo con el otro. Sus manos fueron a mi espalda y bajaron el cierre, el sonido que éste produjo me hizo sentir ansias.

Niall bajó la parte superior de mi vestido hasta mi ombligo.

-Muy bonito-murmuró con gusto al ver el brasier negro con encaje rojo que traía puesto. Niall acunó mis pechos en sus manos y se mostró más ávido por quitarme el vestido, hasta que me lo quitó por completo.

-El mejor cumpleaños de mi vida-gimió y se arrodilló ante mí; completamente embelesado.

Niall tomó mis caderas, acercó su boca a mi vientre, depositó un beso y mi piel se erizó. Luego dio vueltas con su lengua alrededor de mi ombligo. Cerré los ojos y cuando esperaba seguir sintiendo su lengua en mi vientre, comencé a sentirla en mi pelvis. No fue más abajo...., y aunque yo sí lo quería; me sentí aliviada porque en lugar de eso Niall optara por subir su lengua a lo largo de mi torso hasta que llegó a mi cuello.

Luchaba contra las ganas que tenía de que mis labios fueran atendidos por los de Niall justo como él lo estaba haciendo en mi cuello. Besando, chupando y succionando con suavidad y algo de timidez.

-Te quiero así-gruñó Niall en el momento en que me giró y restregó su hinchado miembro entre mis nalgas. Me sujetó las caderas y se comenzó a mover como si me estuviera embistiendo por detrás. Su aliento jadeante, me hizo saber que estaba disfrutando el contacto. Pero yo lo necesitaba entre mis piernas.

-¿Te importa si te quito esto?-me giré de frente a él.

-En absoluto-contestó Niall y se dejó quitar la camisa.

Adoro su piel blanca y suave, pero también adoro la dureza en sus brazos.

-También voy a quitarte esto-le anuncié cuando le bajé los pantalones. Y entonces ahí estaba, su abultado miembro; listo para penetrarme.

-¿Quieres esto?-me enarcó una ceja y agarró su paquete, sus dedos cubrían lo que podían de su longitud.

A veces Niall deja de ser un poco tímido en ciertas situaciones. Y eso me excita sobremanera.

-Sí. Eso quiero-contesté.

Apagué las luces y me lancé a sus brazos. Niall me cargó y yo le envolví las caderas con mis piernas mientras él me llevaba a la cama.

Aunque estaba oscuro, la luz del alumbrado público que se colaba por la ventana, me mostraba a Niall siendo bañado por ésa misma luz. Me hacía delirar.

-Dios, de verdad este es mi mejor cumpleaños-comentó Niall mientras pasaba las manos desde mis pechos, mi vientre y entre mis piernas.

-Mmm-musitó él al sentir mi calidez en su dedo cuando introdujo su mano dentro de mi ropa interior.

Empezó a estimular mi clítoris con su dedo índice y yo empecé a retocerme.

Posó sus labios sobre uno de mis pechos y succionó mi pezón en contraste con mi clítoris, lo cual me hizo respingar con placer.

-Estás lista-dijo Niall con la voz espesa y caliente-. Ahora yo necesito ayuda, ven, tócame.

Me puse de rodillas en mi cama y así lo hice. Tomé su miembro en mis manos y lo estimulé. Moví mi puño arriba y abajo del miembro de Niall. Las diferentes expresiones de placer en su rostro me animaban a ponerle más empeño a mi labor.

Tóxico |N. H.| (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora