Ya habían paso algunos días, las cosas se habían puestos raras para algunos y para otros eran normales. Aarón y Edgar aún no revelaban como habían comenzado su relación, cuando Esteban se enteró hizo su drama y Edgar le siguió, era algo digno de grabar pero nadie lo hizo por estarse riendo. Jamal y Esteban seguían pasando por algunos momentos incómodos pero agradables, y Mai solo se dedicaba a intentar ser invisible para no interrumpir. Manuel seguía recibiendo las pequeñas notas que tenían un mensaje detrás de estás, Zac seguía molestando de vez en cuando a Manuel y alguna otras veces pasando el rato el uno con el otro. Por otro lado Alem y Sebastián apena si se saludaban cuando se encontraban pero no habían vuelto a hablar, como en algún momento lo hicieron.
Martes 6 de octubre
— Feliz cumpleaños Esteban— gritaron Edgar y Sebastián tan pronto como vieron al mencionado.
— Gracias— contesto Esteban con una sonrisa.
— ¿Hoy es tu cumpleaños?— pregunto Jamal, que se encontraba a su lado.
— Si— contesto Esteban.
— Entonces, Feliz cumpleaños— lo felicito Jamal.
— Gracias— contesto Esteban nuevamente.
— ¿Y?, ¿Va a ver pastel o algo así?— pregunto Edgar.
— No creo, o no se mis padres— contesto Esteban.
— Hay que hacer algo— dijo Sebastián mientras se recargaba en Esteban.
— ¿Cómo que?— preguntaron Edgar y Esteban.
— No sé— respondió con simpleza Sebastián.
— ¿Qué hacen?— pregunto Manuel llegando junto con Zac.
— Felicitando a Esteban por su cumpleaños— respondió Sebastian.
— Cierto, que hoy es tu cumpleaños, feliz cumpleaños Esteban— felicito Manuel mientras le deba un pequeño abrazo.
— Gracias— respondió Esteban mientras correspondía el pequeño abrazo, pero algo que ellos no sabían era que había dos personas que los miraban algo molestos.
— Esto huele a celos— susurro Sebastián a Edgar mientras señalaba a Jamal y a Zac quienes efectivamente tenían una cara de muy pocos amigos.
— Pensé que era él único que lo notaba— apoyo Edgar.
— ¿Y nos vas a invitar al pastel o qué?— pregunto Manuel.
— Dice que no nos va a invitar— interrumpió Edgar.
— ¿Por qué?— pregunto Manuel.
— Dice que el pastel va a ser solo para él— le siguió el juego Sebastián.
— Y no nos va a dar— dijo Edgar.
— No te pases Esteban, eso no se hace— les siguió el juego Manuel.
— Pero si yo no dije nada— se quejo Esteban.
— Bueno ya, entonces ¿Hacemos algo para celebrar a Esteban?— pregunto nuevamente Sebastián.
— ¿Algo como qué?— pregunto nuevamente Edgar.
— ¿Y si le compramos un pastel y se lo embarramos en la cara?— propuso Manuel.
— Suena bien— apoyo Edgar.
— No, que les pasa— se quejo Esteban casi al instante.
— ¿Entonces qué propones?— pregunto Edgar a Esteban.
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Eight beating hearts
RomanceLa vida de 4 chicos se ve completamente alterada por otros 4 chicos, que vienen de intercambio desde otros países. Una historia basada completamente en la fantasía, y uno que otro suceso de la vida cotidiana de cualquier adolescente.