Capítulo XXIII

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Pasaron unos días desde aquello y, ahora sí, todo había vuelto a la normalidad, aunque ahora había cosas de las que estar más consientes.
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Alem: ¿Y cuándo me invitas mi helado?

Sebastián: lo había olvidado jejeje, cuando quieras vamos, ahora sí ya ahorré

Alem: ¿te parece si vamos saliendo de la escuela hoy?

Sebastián: Si, te veo en la salida

Alem: Hasta ese momento
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— Tengo flojera— se quejó Sebastián mientras soltaba un suspiro.

— Yo también, y también sueño— apoyo Les.

— ¿A qué hora llego el profesor? — pregunto Daihi.

— No lo sé, ya se tardó mucho— se quejó Les.

— ¿Y Edgar? — pregunto Sebastián.

— Con Aaron— contesto Daihi.

— ¿Soy yo o ya nos abandonaron? — pregunto Les.

— Creo que ya nos abandonaron— contesto Sebastián.

— Antes venía a la escuela con Aaron y ahora sale más temprano para pasar por Edgar, y llegan más tarde que yo— se quejó Daihi.

— Para mí que si son pareja— comento Sebastián.

— Yo digo que si— apoyo Les.

— Hay que preguntarles— sugirió Daihi.

— Llegamos— dijo Edgar mientras intentaba recuperar el aliento después de haber corrido tanto.

— Casi llegamos tarde— dijo Aaron igual que Edgar.

— Llegaron tarde, pero más temprano que el profesor— comento Sebastián mostrando la hora.

— Bueno, llegamos antes que le profesor— dijo Edgar.

— Algo es algo— dijo Les.

— ¿Y por qué llegaron tan tarde? — pregunto Daihi.

— Bueno, lo que pasa, es que ocurrió cierto incidente— comento Edgar recordando lo sucedido— como sabrán mi hermano viene a veces, y tiene las llaves de mi cuarto y pues....

Media hora antes

— Mira al dibisdibis— dijo Edgar señalando la imagen de su celular.

— ¿Quieres una galleta? — pregunto Aaron mientras le extendía el paquete de galletas.

— Si— dijo mientras tomaba una.

Y así siguieron conversando, hasta que inicio una ligera pelea.

— Es qué está canción es una de las mejores— dijo Edgar poniendo la canción.

— No, esa es una buena, no una de las mejores— dijo Aaron.

Y así es como se empezaron a dar pequeño manotazos para que el contrario se diera cuánta de que estaba equivocado y hubo un punto en dónde Aaron se paró de la cama y le enseño la foto de su celular pero esto causo que Edgar se hiciera demasiado para atrás pues pensaba que se lo iba a golpear con el celular, pero al hacerse tanto para atrás Edgar perdió el equilibrio y empezó a caer y por acto de reflejo tomo la manga de Aaron para no caer pero eso ocasionó que Aaron también callera, pero Aaron sobre Edgar, que estaba sobre la cama, y como si eso no fuera malo, todavía paso algo peor.

— Llegó tu hermano favorito— mencionó uno de los hermanos mayores de Edgar, pero al ver aquella escena solo se quedó estático mirando lo sucedido— ¿Qué está pasando aquí? — pregunto de manera dramática.

Eight beating heartsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora