Escribiendo poemas
— Tomen— dijo Sebastián mientras les daba una hoja y un lápiz a cada uno
— Y esto para que o que?— pregunto Edgar mientras agarraba una hoja y un lápiz
— Pronto lo sabrán— dijo riendo Sebastián
— Esto no me da confianza— dijo Manuel sosteniendo su hoja y lápiz con duda
— Por qué?— pregunto Sebastián con falsa inocencia
— Esto no me gusta— dijo Esteban a lo que Sebastián solo sonrió con más ganas
— Ahora si, que ya todos tienen lo que deben, el lápiz es la espada y la hoja el escudo, peleen— dijo Sebastián con ánimos, a lo que todos se le quedaron mirando con cara de "qué?"— no pues, ni quería— dijo para luego empezar a reír— bueno no, van a escribir un poema— dijo ya hablando encerio
— Un poema?— pregunto Esteban
— Si— aclaro Sebastián con su sonrisa creciendo cada vez más
— De que o que?— pregunto Edgar algo temeroso pues ya se imaginaba la respuesta, y no estaba muy lejos de la realidad
— De sus novios— contesto mientras sacaba su lengua discretamente, aunque eso es casi imposible
— Por qué o qué?— pregunto Esteban algo avergonzado
— Pues básicamente, para matar el tiempo— respondió con simpleza
— Y si nos negamos?— pregunto Manuel listo para salir corriendo de ese lugar
— Voy a publicar esta fotos de ustedes vestidos como maid's— dijo mientras les enseñaba su celular dónde tenía las fotos tomadas con anteoridad
— Cuando tomaste eso?— pregunto Manuel mientras se sonrojaba al recordar ese día
— Uno tiene sus trucos— dijo sonriendo
— Elimina esas cosas del diablo— dijo Edgar exaltado y avergonzado
— No, hasta que escriban sus poemas— condicionó
— Teñido— se quejo Manuel
— Es natural— contesto mientras movía su cabello sacudiendo su cabeza
— Porque diva no se hace, se nace— mencionó Edgar riendo, a lo que los tres chicos que tambien se encontraban presentes empezarán a reír
— Bueno ya, entonces escriben el poema?— pregunto Sebastián
— Pues ya que?— de resigno Esteban
— Debo de admitir que no no me veo mal, así que por mi bien— dijo Edgar dejando la hoja y el lápiz a un lado
— Ya se le pegó lo de Aaron— mencionó Manuel con un poco de risa
— Oye— se quejo Edgar
— Seguro?— pregunto Sebastián, ignorando lo demás
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Eight beating hearts
RomanceLa vida de 4 chicos se ve completamente alterada por otros 4 chicos, que vienen de intercambio desde otros países. Una historia basada completamente en la fantasía, y uno que otro suceso de la vida cotidiana de cualquier adolescente.