One Shots (Camila Cabello y Tu)

#36.3 G!P

Ya estaba en casita, llevaba una semana aquí de reposo y a su vez a dos velas pues mi esposa se estaba tomando muy en serio eso de dejarme un mes sin sexo. Si un mes... no pude evitarlo y salí después de ella irse.

Estaba mirando una serie en nuestra habitación cuando escucho la puerta de abajo.
Pasos subían por las escaleras hasta llegar a la puerta de donde me encontraba. A pesar de saber quien era no dejé de mirar la televisión pues me sentía molesta, bueno más que molesta estaba frustrada.

-Amor ya llegué. - anunció entrando por la puerta. - ¿Amor? - me llamó viendo que la ignoraba.-Bueno mira yo voy a darme una ducha a ver si cuando acabe se te pasa el drama y me hablas.

Se despojó de la mitad de su ropa y entró al baño.

Yo seguí mirando la serie aunque para ser sincera no me enteraba mucho de lo que pasaba desde que llegó Camila.

Pasada la hora ella salió ya con el pijama y se echó a mi lado.

-¿Te duele algo?

Negué.

-Oye que te pasa ahora. - preguntó algo molesta.-_____ en serio esta situación me está pareciendo infantil, mírame.-seguí ignorandola hasta que agarró mi barbilla y me giró hacia ella. - ¿Me vas a decir que demonios te pasa?

-No me pasa nada. - murmuré.

-____ por favor, no me gusta estar así.

La miré fijamente y me di cuenta que se estaba yendo de las manos al ver como poco a poco sus ojos tenían agüilla.

-Solo estoy frustrada...

Alzó una ceja. - ¿Y me estás haciendo vacío por eso?

Asentí despacio.

-¿Sabes que por ello debería dejarte otro mes más sin sexo?

-No por favor, más tiempo no.

-Eres una imbecil, me estabas haciendo vacío porque no te doy sexo desde hace una semana.

-Es que las pajas no se sienten igual...

Negó riendo. - Eres una idiota.

Se acostó con su cabeza en mi pecho y entrelazando nuestras piernas.

-¿Estás cansada? - pregunto.

-Un poco, hoy ha sido un día de locos aunque las últimas horas solo he asistido a mirar una cirugía.

-Duerme entonces mi vida. - le beso la cabeza.

Ella se acomodó de nuevo y seguí viendo la serie. A poco más de media hora comencé a sentir como Camila metía su mano bajo mi camiseta y la subía un poco haciendo garabatos en mi abdomen.

Yo acaricié su pelo con suavidad ya que le encantaba que le hiciera ese cariñito para dormir.

Poco a poco su mano comenzó a bajar y bajar hasta dar con el elástico de mis pantalones. Alcé una ceja y mire su mano jugando con el pantalón. Vi como aprovechando que lo subió un poco coló su mano por completo bajo mi parte inferior del pijama y se dirijó sobre la tela de mi boxer para acariciar mi miembro tranquilamente dormido por encima.

Me tensé un poco por ello. Giró su cabeza besando mi cuello mientras con su mano palpaba sobre la tela comenzando a despertar a mi amigo.

Un corto gemido ronco salió de mi garganta al sentir su mano fría colarse bajo el boxer agarrando mi fiel amigo ya despierto y duro.

Un movimiento constante de subir y bajar comenzó, con un poco de pereza bajé el pantalón junto al boxer por mis rodillas para poder tener visión y a su vez más facilidad de maniobra.

-Camila... - susurré en un suspiro.

Los movimientos comenzaban a ser más rápidos y ágiles. Sentía como mis pelotas se encogían y como mi vientre se tensaba, en menos de un minuto me había corrido en su mano.

Subió su mano y lamió la corrida que había caído sobre ella.

-¿Ya no te sientes tan frustrada?

-Me siento mucho mejor, gracias...

(...)

-¿Segura no quieres vino? Es tu favorito.

-De verdad mi amor, estoy bien con agua.

-Pero tu nunca lo rechazas.

Nos encontrabamos en nuestro restaurante especial, donde le pedí matrimonio, cenando por nuestro tercer aniversario.

-Cariño, estoy embarazada.

-No me pongas excusas y toma un poco.

Tomé la copa y la frené en mis labios bajo la mirada atenta de ella. Me acababa de dar cuenta.

-¿Ya?-preguntó viendo si lo había pillado.

-Oh dios... estas embarazada.

-Vale si, ya.

-Oh dios... Vamos a ser mamás, ¡vamos a ser mamás!

Narra Camila.

Un par de personas nos miraron con desagrado por el escándalo mientras otras nos felicitaban. Yo con vergüenza trataba de cubrir mi cara con la carta.

-Amor por favor.

-Ay ay estoy emocionada. Ay dios... Vamos a casa.

Se levantó corriendo dejándome sola. A los segundos volvió acordándose de mi y me llevó en brazos hasta el coche después de haber pagado todo.

En el transcurso no dejaba de acariciar mi barriga. Se veía muy tierna, no podía dejar de verla con esa sonrisa tan deslumbrante.

Una vez en casa decidimos estar un rato en el sofá hablando.

-Y pienso regalarle un cochecito, como Kylie Jenner a su hija, para que hagan carreras, evidentemente va a ganar la nuestra. - dijo con orgullo y entusiasmo.

Yo no había hablado en toda la noche, solo la miraba enamorada como me contaba cual eran sus planes.

-¿Por qué tan callada? ¿No te hace ilusión?

-Claro que me la hace, pero me encanta ver esta faceta de madre tuya.

-Tengo que ser la madre perfecta para este bebé perfecto. - acarició y besó mi barriga.-Pienso dejar las paredes de la habitación en blanco para cuando nazca que ella me diga de que color la quiere.

-Cariño dudo que nuestro bebé sea capaz de elegir esas cosas cuando nace.

-Ya verás como si, y vamos a comprar una casa en el campo y a tener caballitos, nosotras podemos tener un macho y una hembra y criar nuestro potro para cuando ya sea mayor nuestro bebé regalarselo.

-Amor mío. - agarré sus mejillas. - Calma, aun falta mucho para que naza.

-Pero yo lo quiero ya, estoy impaciente.

-Ya verás que en menos que cante un gallo lo tienes en brazos.

-Después de este quiero mellizos y después de los mellizos quiero gemelos, si nos salen niños quiero una niña o dos.

-Primero vamos con uno y luego ya hablamos de los demás.

Me miró sonriente y me beso.

-Te amo con locura.

-Y yo a ti mi vida. - le sonreí y ella recostó su cabeza sobre mi vientre plano para seguir hablando de sus planes cuando nazca.

Pues aquí lo tenéis todo para vuestro disfrute.

⭐y💬 para más.

Por cierto esto es una locura pero estamos en el top 100 imaginas. (puesto 81 ahora mismo) Mil gracias por el apoyo.❤️❤️❤️