Alex
Mis manos tiemblan sobre el tablero y me siento como un tonto.
— ¿Estás bien, Alex? —Luna susurra suavemente a mi lado.
Enfoco mi mirada en el volante, concentrándome en la curvatura circular y pensando que un automóvil común es totalmente distinto de un automóvil de competencia. Así que empiezo a respirar bien.
Le doy una mirada a Luna por la comisura de los ojos.
— Estoy bien.
Ella no luce como que me cree y hace un gesto con los labios que me hacen concentrarme en esa parte en específica. Entonces, siento que mi miembro no está conectado a mi cerebro porque ahora mismo palpita contra mi pantalón con furia. Mis mejillas se acaloran.
Luna se mueve ligeramente y el mechón que antes coloqué detrás de su oreja, vuelve a taparle una parte del ojo. Antes de que lo piense, me estoy acercando a ella y volviendo a colocarlo con suavidad, deteniéndome en acariciar el punto detrás de su oreja que llega al cuello. No puedo dejar de notar fascinando cómo su piel de gallina sobresale alrededor de su clavícula. Y se que esto esta mal en todos los niveles, pero me acerco a ella y coloco mis labios en ese espacio.
— Alex. —Mi nombre suena extraño cuando sale de su boca.
Me concentro en sus pupilas y le doy gracias al Dios del cielo por permitirme verla ahora mismo, en este mismo lugar.
No puedo dejar de sentirme como si estuviera en una carrera. Y quiero besarla. Quiero besarla ahora.
— Discúlpame.
Es como si un balde de agua fría fuera arrojado contra mi cara y de repente me esté dando cuenta de que esta es Luna, Luna Hill, mi mejor amiga. Debo ponerme en marcha.
Tengo una sensación extraña para cuando arranco el auto. No sé lo que acaba de pasar y me siento como un tonto porque mis manos tiemblan.
Quiero decir, ¿qué es lo que me pasa? Estuve a punto de besar a mi mejor amiga. A la persona que me vio con dientes rotos y calzoncillos, corriendo desde niño. La que ha visto mis lágrimas en más de una ocasión y la que me guarda todos los secretos.
La misma que llamo cuando me siento desanimado, la que llamo cuando estoy feliz. Luna, la única mujer fuera de mi familia que es constante en mi vida. ¿Qué es lo qué pasa? No puedo echar a perder tantos años de amistad en un solo día.
Estoy seguro de que me afecta el hecho de que no he estado con una mujer desde hace más de un año justo para cuando empecé la carrera profesional en la Fórmula 1. Sí, eso debe ser. Tengo que aclarar mi mente.
Enciendo la radio para que la música ayude a aligerar el ambiente tenso que yo mismo he provocado en el auto. Una canción de Travis Scott suena en los altoparlantes.
Estoy conduciendo y no tengo rumbo. Las luces del carro de Amanda me siguen.
Me permito mirar a Luna que tiene la cara arrugada. Recuerdo que no le gusta el estilo de música que escucho. Es una de las muchas cosas que nos hace distintos.
Le pido a Siri que coloque un playlist titulado It's sunny outside. Es una lista de las canciones favoritas de Luna y que voy actualizando a medida que me doy cuenta de las nuevas canciones que escucha.
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La pareja perfecta
ChickLitLuna Hill es una escritora frustrada que tiene seis meses buscando la inspiración sin encontrarla. Su publicista le da un último aviso de que debe entregar un nuevo libro en tres meses o deberá terminar el contrato. La famosa promesa de la Fórmula...