Capítulo cuarenta

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Capítulo dedicado a
astridnavarro14
Gracias por comentar en todos los capítulos.

Estuve bastante tiempo hablando con mi suegra, me contó muchas anécdotas de sus hijos y no pude evitar sonreír cuándo me contaba las cosas que hacía Joseph en su adolescencia.

Me dio un pequeño tour por la casa y me sorprendió ver lo grande que era, en la habitación de Joseph todavía estaba la cuna dónde dormía Chad cuándo era un bebé y muchos de sus juguetes.

Luego de recorrer toda la casa mi suegra me pidió que por favor le ayudara a servir la comida porque ya era hora de almorzar.

—Los mellizos me contaron que estas viviendo con Joseph—me puse nervioso por su comentario, no quería Ellen se molestará por eso y tampoco quería contarle sobre mi embarazo porque habíamos decidido con Joseph que se lo diríamos a todos en el almuerzo—Sé lo que estás pensando y no, no me molesta que vivas con él—me sonrió mientras me pasaba unos platos—creo que les ayudará a fortalecer su relación, sé que todavía estas muy joven pero por lo que veo tú y mi hijo van muy enserio así que me alegra saber que están formalizando su relación.

—Vamos poco a poco, esta semana comenzamos a ir a terapia de pareja porque después de todo los problemas que tuvimos por la oposición de Chad a nuestra relación hay muchas cosas en las que debemos trabajar—Ellen me señaló el lugar dónde guardaba los cubiertos para que los sacará—Amo a Joseph y no estoy dispuesto a separarme de él por el que dirán o por el simple hecho de que alguien no está de acuerdo con lo nuestro.

—Me alegra saber que mi hijo tiene alguien cómo tu a su lado—estaba feliz porque al menos le caía bien a la madre de Joseph y no iba a tener que preocuparme porque por mi culpa se ocasionaran más problemas familiares.

Terminamos de sacar todo lo necesario para poner la mesa y cuándo íbamos a salir de la cocina para llevar todo a la mesa apareció mi novio.

—¿Qué se supone qué estás haciendo Andrew?—frunció el ceño.

—Ayudando a mi suegra Joseph—se acercó a mi y me quito los platos que tenía en las manos—¿Qué se supone que haces tú aquí molestándome?—rodee los ojos.

—Evitando que hagas cosas que no debes hacer—lo miré seriamente para que se callara ya que su madre nos estaba mirando con curiosidad.

—No estoy haciendo nada que no pueda hacer—le quite los platos—Ahora ve y llama a los demás para que venga a comer.

—Esto no se queda así Andrew—me advirtió—y no llames a mi madre suegra, haces que me sienta viejo.

—Ya no eres una niño Joey—menciono su madre antes de reírse—¿O acaso quieres seguir siendo el hijo de mamá?—está vez no pude evitar reírme.

—No me agrada que ustedes dos se lleven también—se cruzó de brazos—No están divertido para mi.

—Ese es el objetivo—su madre le golpeó cuándo trató de robar un poco de comida—ve a lavarte las manos y a llamar a los demás—frunció el ceño, pero no le quedó otra opción que ir hacer lo que su madre le había pedido—¿Algún día madurara?.

—No lo creo—los reímos y seguimos con nuestra labor.

Cuándo todo estuvo listo le pedí un poco de limón a Ellen para evitar las náuseas, se quedó viéndome como si supiera que estoy embarazado pero le pregunté un par de cosas para despistarla un poco.

¿Amor o capricho?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora