XXXXVI.- Cuestionamiento

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“Es un dicho bastante común que no puedes tapar el sol con un dedo, mucho menos ocultarle algo a quienes te conocen enteramente”

Cuando estaba paseando por el jardín del palacio, escuché un ruido raro, me detuve y mire a mi alrededor, pero, no vi nada.

-         ¿Escuchaste algo?

Me gire hacia mí fénix que estaba por un lado mío, el me asintió y se paró en mi hombro.

-         Psss.

-         ¿Ehh?. – mire el arbusto que se movió y me incline un poco.

-         Psss joven.

-         ¿Ahh?. – algo me jalo del brazo y me metió dentro del arbusto.

-         Shhh. – mire a Sean con cara de pánico mientras me tapaba la boca, mi fénix no se sentía muy feliz que digamos por el secuestro en el jardín.

-         Okay, ya, pero ¿qué demonios haces aquí?

-         Joven Brainius, quiero hablar de algo privado y sumamente importante con usted. – me miró serio y habló lo más bajo que pudo.

-         De acuerdo, dime. – lo mire tranquilamente esperando su importante discusión.

-         Joven, ¿a usted le gusta esa señorita?

-         ¿Ah?. – me extraño su pregunta, como si sintiera algo por alguien.

-         Yo, se que quizás suena raro pero usted no está preparado para que le rompan el corazón de manera cruel, usted…

-         Basta. – lo detuve antes de que siguiera. – escucha, dudo mucho que llegue a ser algún día una amiga tan siquiera, así que. – me levanté y me sacudí. – no debes preocuparte por nada, no es como si la volviera a traer aquí.

-         ¿Traer a quién?

Me congelé en mi lugar por la voz de mi padre.

Sabia que tenia que confesarle esto, pero no tan rápido, todo mi majestuoso plan se desmorono. Me gire a ver a mi papá con Sthorm por un lado, ambos portando sus respectivos uniformes y obviamente luciendo impotentes, Sean salió rápidamente del arbusto y me miro con pánico.

-         Ajam.- me aclaré la garganta y le sonreí a mi papá.- Padre es un gusto verte hoy, luces bien.- Le sonreí nerviosamente mientras veía a Sthorm negar con la cabeza.

-         ¿Y entonces?.- me miro con una ceja levantada, obviamente esperando una respuesta coherente.

-         Sean me dijo que trajera a mi compañera para no quedarme a darle tutorías en la escuela.- dije mientras lo apuntaba con el dedo, obviamente el dichoso hombre se puso histérico porque le eche la culpa, incluso hasta se volvió pálido de los nervios.

-         Sean.- Sthorm hablo con un tono firme mientras se dirigía a él, Sean tomo posición de firmes antes de contestar.

-         ¿Si?

-         ¿Hay algo que debas reportar?.- lo miro fijamente esperando su respuesta concreta. Yo por mi parte entre en pánico pero no lo deje notar, me veía tranquilo, al menos eso espero.

-         Si, si lo hay.- me miro con compasión y se giro hacia mi padre.- Volvieron a aventar la mochila del joven a encima de un árbol.

Lo mire con cara de sorpresa, no pensé que me ayudaría el a cubrir mi pequeña travesura, le ira mal si dejo que me encubra.

-         Yo.- hable despacio, pero en un poco nervioso.- Supongo que ya te disté cuenta que traje a alguien al palacio.- mi padre me miro con una ceja levantada y aunque no lo demostrará en sus ojos se reflejaba la diversión.

Un Ángel Sin Nombre (Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora