Un Ángel Sin Nombre (Borrador)

XXXXXIX. - Advertencias y Reglas.

"Los seres humanos tienen derecho a la libertad, son libres de hacer y decir lo que quieran, pero su único límite a no cruzar es el daño a ese derecho de otras personas."

- ¿Me entiendes lo que te digo Brainius? - me pregunto Sthorm, yo miraba por la ventana en el salón de estudio y le contesté sin mirarlo.

- Lo hice.

- Y entonces genio, ¿podrías decirme cuáles serán tus responsabilidades de ahora en adelante?

- En primer lugar.- me gire a verlo mientras le hablaba serio.- debo tratar el tema principalmente con mi padre, él debe de decirme con exactitud qué y por qué, en segundo lugar debo hacerme la idea de que estoy cambiando de etapa y debo enfocarme en el futuro, y por último soy libre de hacer lo que quiera respetando los límites y las reglas impuestas por padre, ah y claramente, por ese grupo de papeles de ahí.- señale con mi dedo todos los documentos impecables y sumamente importantes que estaban encima del escritorio, Sthorm que estaba a un lado de éste parado mientras sostenía uno de los libros me miro con el ceño fruncido.

- Esos papeles de ahí no son más que la preparación para tu futuro como heredero, no solamente tenías que aprender acerca de la guerra y estrategias para ser un líder como tu padre, también debes aprender a dirigir a tu pueblo y cómo comportarte de ahora en adelante.

- Wow, parece que todo mi futuro está escrito. - Sthorm se molestó un poco por mi claro sarcasmo y cerro el libro.

- Eso es a un lado de tu deseo, ahora aparte de todo eso que debes de asimilar y aprender necesitas esmerarte aún más para ser parte de los 7 grandes, ¿si es que todavía tienes esa aspiración? -me miró fijamente mientras esperaba mi respuesta, yo sonreí.

- Por supuesto, ¿por qué habría de cambiar de opinión?

- Pues parece que al joven le han robado su noble corazón y preocupa que cometa una tontería sólo por ese amor que él cree es real.

- ¿Por qué todo el mundo me dice eso? -le dije molesto.

- Creo que es bastante obvio que piensas y actúas en base a lo que sientes, y es normal cometer errores cuando uno cruza la adolescencia, pero eso no exceptúa que no estemos angustiados por lo que llegues a hacer.

- Entonces, ¿esperan qué cometa alguna tontería por mi historial? – lo mire asustado.

- Si. - camino hacia mi hasta llegar a estar enfrente de mi escritorio. - debido a tu historial de acciones es que nos preocupa la tontería que cometas, ya escapaste una vez, siempre puede haber dos.

- Así que a eso iban todos.

- No todos, es un claro hecho que sucederá, pues tú no sabes absolutamente nada de como son las personas y tú más que nadie te dejas influenciar fácilmente por tu inocencia eso sin hablar de tú manera de ser.

- Oh, cuanta franqueza. - le dije sarcásticamente, él sonrió.

- Es nada más que la verdad. - se regresó al escritorio suyo y boto el libro con un poco de descuido, esos documentos y libros son demasiado importantes, se giró a verme y me dijo serio. - Así que sólo espero que el joven y pequeño Brainius que ha sido criado lejos de la maldad humana no sea fácilmente manipulado por ahora la supuesta novia, porque nadie desea ser tu amigo por lo que se sabe gracias a todos los que te vigilan a donde vayas.

- ¿Ya me puedo ir maestro? - le cambie el tema, él miro al reloj colgado en la pared.

- Ya, nos vemos mañana mocoso. - Me levante de mi silla y tome mis apuntes. - No tomes a saco roto lo que se te dice. - me dijo antes de que saliera del salón de estudio, me di la media vuelta y le dije serio.