Enamorando al magnate

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Me levanté de golpe con unas ganas inmensa de vomitar.

Corrí hasta el inodoro en donde devolví todo lo que había cenado.

-Amor- sentí como tomaban mi cabello

-No mires- me sentía vulnerable

-Tranquila esto es parte del embarazo- el comenzó a acariciar mi espalda.

Sentía como mi cuerpo intentaba sacar todo de mi interior, pero ya no tenía nada.

-En la mesa de noche hay una pastilla para controlar mis vómitos- le notifique

Él soltó mi cabello y corrió a buscarla.

Regreso unos minutos después con un vaso de agua y la pastilla.

-Gracias- me la tomé para luego bajar el inodoro y volverme a lavar la boca

Él me acompaño hasta mi lado de la cama en donde se quedó mirándome cuando me acosté

-Estaré a tu lado- se hizo un espacio mientras me abrazaba por mi espalda.

-Solo es para cuidarte- asentí mientras sentía como colocaba su brazo en mi abdomen.

Victoria se giró hasta estar cerca de mí también.

Era como si los dos se pusieran de acuerdo para utilizarme como jamón, pero entre tanto me sentía amada.

-¿Estás bien?- asentí para irme quedando dormida de nuevo

***

-No hagas tanto ruido que mamá esta dormida-

-Baby shark do do do – canto bajito dando pequeños saltos en la cama

-Princesa que mamá está dormida- abrí mis ojos

-Buenos días- susurré mirándolo

-Mami- Victoria tenía su uniforme y dos intentos de coleta

-Ven princesa que mamá te arreglara tus coletas-

Andrew la bajó y ella rápidamente corrió hacia mi.

Le arregle sus dos coletas y tomé su mano.

-Yo la llevaré a la escuela- asentí

-Yo iré a trabajar-

-Recuerda desayunar- asentí mientras les abría la puerta

Me baje al nivel de Victoria y bese su frente

-Adiós hermosa- ella me abrazo

-Besito para el bebé- pego sus labios a mi abdomen

-Adiós- Andrew no sabía cómo despedirse

Beso mi mejilla para luego bajar sus labios a mi abdomen.

-Adios a mi princesa o príncipe- reí

Los vi subirse a su auto y salir.

Andrew andaba con la ropa de Misael.

Fui a ducharme con tranquilidad luego de mucho tiempo.

Siendo madre soltera aprendí que estar en el baño sola era un privilegio.

Como siempre miraba la puerta esperando que mi princesa se asomara, pero luego recordaba que ella se había ido a su escuela con su papá.

Al salir me coloque uno de mis trajes ceñidos favoritos.

Me mire en el espejo y podía ver un poco mi barriga sobresalida.

-Estás creciendo en mi interior hermoso- acaricie mi barriga