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Maratón 5/5

-Bueno mira aquí está mi maquina puedes utilizarla- me ofreció su área de trabajo

-¿No tienes miedo de que lo dañe?- lo mire

-Para nada hermosa, se que lo harás bien- sonreí

-¿No crees que debería estudiar este campo?- él negó rápidamente

-Este campo no es tanto de estudio, aunque sí pueden darte un poco más de habilidades, pero como siempre digo aquí lo mejor es la experiencia- asentí para sentarme en su silla

-Bueno me enviaron una pista de tu dibujo y me tomé el atrevimiento de separarte la tela- asentí emocionada.

-Están estas- sacó varias telas

-Están hermosas- dije sincera

-Vamos a enseñarte lo básico- asentí

De un bote de basura que lo único que tenía eran pedazos de diferentes tamaños de tela saco varios.

-Te mostrare algunas puntas que tiene esta maquina- asentí

Pasamos cinco horas en donde él me enseñaba cómo coser el vestido para Victoria.

Al principio cometía muchos errores.

Hicimos algunas pausas durante el día para comer.

***

Cuando fue lunes volví a mi trabajo con Andrew.

Desde hace algunos días todo había cambiado.

Más bien luego de ese día en donde me entregue a él todo cambió.

Andrew ya no quería que lo buscara en su apartamento ni nada.

-Pasa que solo fuiste un polvo y adiós - escuche esa voz irritable en mi interior

Negué con cuidado para no virar el café que tenía en mi mano.

Cuando llegue a mi puesto coloque los dos café en mi escritorio.

Tome el atrevimiento para verificar si él había llegado, pero nada.

Me senté en mi escritorio para encender mi ordenador.

Al no tener a mi jefe aquí entré a mi blog el cual lleva semanas sin ser revisado.

El mismo tenía demasiados comentarios que no había leído.

Como siempre marque el botón para redactar.

"Hola mis cielas, se que las he dejado en el abandono de nuevo, pero muchas cosas han pasado. Se que esto en un inicio era para darles consejos, pero creo que yo misma caí en mi trampa. Creo que comencé a sentir algo por mi magnate. Así que aquí les resumo cinco señales en donde pueden saber si les preocupa o siente algo por su magnate. Primero sienten la necesidad de saber donde esta o con quien están. Segundo extrañan el tener que hacer el trabajo que antes les daba. Tercero sienten miedo de perderlo en cierta manera. Cuarto continúan comprando lo que le gusta sin que se lo digan. Quinto saben que de cierta forma algo se perderá. Suerte mis cielas"

-Está muy concentrada en lo que está haciendo señorita Lewis- cerré la ventana rápidamente

-Lo siento- me use de pie

-Le traje su café- le señale el vaso que tenía en mi escritorio al lado del mío

-Hoy me lo regaló otra personas- sonrió alzando su vaso que tenía un corazon dibujado

-Oh, entonces se lo regalaré a alguien- dije sin más

-Perfecto, en 20 minutos entre para que me diga que tengo para hoy- asentí para que él pasara por mi lado

Enamorando al magnateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora