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⚠️𝘈𝘥𝘷𝘦𝘳𝘵𝘦𝘯𝘤𝘪𝘢: 𝘴𝘢𝘥, 𝘦𝘯𝘨𝘢𝘯̃𝘰 ┄┄┄┄┄┄┄┄┄┄┄┄┄┄┄┄┄┄┄┄
- Ginny! - gritaste el nombre de tu novia por el pasillo. Llevaban 1 año y 6 meses juntas como pareja, al principio fue difícil por estar en diferentes casas, tu un águila y ella una leona, como también la aceptación de sexualidad de Ginny y su familia, pero con todo eso lograron salir adelante y formar una bonita relación.
- Hey! Como despertaste -dijo Ginny cuando llegaste con ella.
- Bien. - le diste un pequeño beso como saludo. - y tú? - preguntaste.
- Perfectamente. - contesto para luego abrir las puertas del gran comedor y dirigirse a la mesa de los Gryffindor donde estaban los amigos de Ginny y tu mejor amiga Alicia Spinnet.
El desayuno paso sin muchos inconvenientes, fueron risas y buena comida. Hasta que la lechuza negra de tu familia se hizo presente en el comedor poniéndote los pelos de punta.
- Tus padres... - murmuro Ginny, ella sabía la situación con tus padres y no le gustaba mucho que digamos. Tus padres eran sangre pura con creencias puristas, siempre exigían lo mejor obligándote, cuando supieron sobre tu sexualidad y relación te gritaron cosas no muy bonitas como; eres una abominación, deshonraste la familia y muchas cosas más. Ahora tenían una tonta idea de mudarse del país y llevarte a otra escuela de magia, Ilvermorny en estados unidos.
- Si. - lograste decir, bajo la atenta mirada de ella abriste la carta con temor, en ella decía:
Raquel Grey
La decisión ya esta tomada, nos vamos a estados unidos para ver si al fin dejas de ser una deshonra para la familia y te centras en ti una vez por todas.
Nos vamos este fin de semana, tus cosas están arregladas y no hay objeciones sobre el tema.
Hable con Dumbledore y te iras mañana en la mañana.
R.G
Al terminar de leer la carta te quedaste congelada, de pronto nada se escuchaba y nada existía a tu alrededor, tenias que renunciar a tu vida de un momento a otro a Ginny, tus amigos, a todo. Abrumada por tus pensamientos te paraste de el lugar para salir rápidamente de del gran comedor y dirigirte a los baños abandonados.
Ginny por su parte a penas saliste te siguió a paso rápido gritando tu nombre para que las esperaras. Cuando llego a los baños abandonados te vio apoyada en la pared mientras tratabas de tranquilizarte y contener tus lágrimas.
- Oye... que pasa - dijo acercándose a ti, apenas estuvo delante de ti te aferraste a ella con todas tus fuerzas, tratando de mantenerla contigo de alguna manera.
