Capítulo 25

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Alexander

Con mis manos manchadas completamente de sangre, me dirijo al baño para limpiármelas. Estoy tan acostumbrado de estar cubierto de ella que no me importa, pero no puedo ir así por la calle. A pesar de tener a todos los polis bajo mi mando no me apetece lidiar con problemas.

Suficiente tengo con uno en casa.

Una vez que estoy listo, me dirijo para salir de la habitación. La reunión ha sido una mierda y mañana por la mañana tendré otra sobre los asuntos que no he podido discutir esta noche debido al comportamiento de unos de mis socios.

Cuando salgo por la puerta veo a uno de mis hombres vigilando, pero me topo con mi hermano, quien se encuentra en medio de la sala.

Decido ignorarlo, pero da un paso adelante bloqueando mi camino.

—No estoy para tonterías, si vas a hablar del trabajo suéltalo.

—Sabes perfectamente a que me refiero.

—Me da igual que estés celoso, búscate una puta para que te la chupe, pero a mi no me vengas con esto.

Conozco su mirada al completo, al fin y al cabo, hemos vivido juntos y sabemos como nos comportamos cada uno.

—¿Qué coño ganas haciendo que sea tu novia delante de todos?

—No todo es cuestión de trabajo— le miro fijamente mientras le contesto— Cada uno tiene formas de divertirse, y la mía es esta. No soy una niñera y si tenerla bajo mi techo me indica que la puedo controlar mejor para mi, menos trabajo tengo.

—Lo que tienes es una obsesión. — me río ante su comentario.

—Llámalo como tu quieras, suficiente que estoy siendo paciente con ella. ¿Conseguiste averiguar algo? — niega con la cabeza— Joder, avísame si consigues algo. Necesitamos encontrar respuestas cuanto antes.

Se escuchan unos tacones, alzo la vista y veo a una de las encargadas venir hacia mi. No expreso de ninguna forma en mi rostro la sorpresa que me genera verla por aquí, pero no puedo evitar poner mi cuerpo en alerta. Se a la perfección que algo raro ha tenido que pasar para que venga a buscarnos.

—Jefe— asiento al escucharla y agacha la cabeza al vernos a los dos. — Varios hombres me han pedido privado con la nueva.

—¿Qué nueva? — Kaiden la mira sin entender nada.

A pesar de que este local sea mío, eso no significa que sepa este tipo de cosas. Estos clubs solo son una forma de lavar dinero y de hacer reuniones, mi hermano es quien se encarga de que este tipo de negocios sigan su curso sin problemas.

Pero el hecho de que hagan esta estúpida pregunta, me da a entender de que algo falla aquí.

—No se de donde ha salido. Simplemente me dijeron que pidió bailar...

Me alejo de ellos para dirigirme al balcón. Me fijo en la cantidad de personas que hay alrededor del escenario principal. Mi vista se fija en esa pequeña figura que veo a lo lejos moverse con tan facilidad.

Reconocería esa figura en cualquier lugar.

Ejerzo una fuerza sobre el material donde mis manos se encuentran apoyadas para intentar controlarme y no sacar mi pistola. Mi cuerpo se queda en esa misma posición lo que parece una eternidad, todo mi autocontrol va a comenzar a irse a la mierda si la música no se para.

Pero no lo hace.

Me giro observando a mi hermano discutir con la encargada, pero paso de ellos. Con el enfado que tengo ahora mismo nadie es capaz de controlarme, ni yo mismo soy dueño de mis acciones ahora.

Placer OscuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora