Una hermosa mujer pelinegra se encontraba delante de la residencia de los Sano, una pequeña pelinegra con unos hermosos ojos verdes como los de su madre colgaba de una de sus manos.
—¿Qué hacemos aquí mami?—pregunta la pequeña.
—Hoy conocerás a tu hermano mayor—los ojos de la pequeña se iluminaron, estaba emocionada.
Él señor Sano apareció, observo curioso a la mujer que no creyó ver de nuevo en su vida
—¿Qué se te ofrece Kagome?—pregunta amablemente él anciano deparando en la pequeña niña que se escondía detrás de la pierna de su madre—. ¿Quién es la niña?
—Es la hermana de Shinichiro, su nombre es Mitsuki.
—Hola pequeña—se inclina un poco a la altura de la pequeña.
—Hola—saluda tímidamente.
—Pasen—les pide él mayor, tenia que hablar con la mayor—. ¡Shinichiro!
Unos momentos después un pequeño pelinegro apareció en la sala, se quedo congelado al ver a su madre.
—Madre—saluda sorprendido.
—¡Hijo!—lo saluda con una voz chillona, abraza al pequeño—. Mi niño que grande estas.
Él señor Sano veía con molestia a la mujer, él sabia que solo estaba actuando. Carraspeo llamando la atención de la mujer.
—¿No olvidas algo Kagome?—con su cabeza señala a la pequeña pelinegro.
—Lo siento, la emoción me gano—finge una sonrisa—. Shinichiro quiero presentarte a alguien, ella es tu hermana menor, Mitsuki—acerca a la niña al mayor.
Shinichiro la observo de pies a cabeza, era una niña muy bonita sin duda. La niña jugaba con sus manos nerviosamente.
—Hola—Shinichiro se atreve a hablar primero—. Soy tu hermano mayor, espero llevarnos bien.
—Bueno como ya se conocieron—comienza a decir la mujer—. Sano-san, ¿puede quedarse Mitsuki con ustedes unas horas? De ese modo ambos se conocen mejor—sonríe falsamente.
—No veo ningún problema, solo necesito hablar contigo unas cosas.
—Por supuesto.
(...)
—Mami se tiene que ir.
—¿Volverás?—pregunta la niña aguantando sus ganas de llorar, no le gustaba estar lejos de su mamá.
—Claro que si pequeña—le entrega una mochila—. Todo lo que necesitas esta ahí, nada te hará falta—voltea a ver al pequeño que sostenía la mano de la menor—. Me dio gusto verte Shinichiro, cuida de tu hermana—besa la cabeza de ambos niños—. Adiós—la mujer se va.
—Bien, vayamos a mi habitación—Shinichiro encamina a la niña hasta su habitación tomados de las manos.
Se pasaron todo el día y parte de la tarde conociéndose, Shinichiro se encariño con ella rápidamente, se prometió cuidarla y protegerla.
Su tarde de hermanos fue interrumpida por él abuelo, los llamo para comer. Después de comer fueron a jugar un rato más, la hora en que Kagome regresara ya había pasado.
Él señor Sano preocupado tomo la mochila de la menor, inspecciono las cosas que traía la mochila quedando sorprendido. Ella jamás volverá, había dejado a Mitsuki abandonada con ellos.
La mochila traía los papeles de la niña, un poco de ropa y un pequeño peluche, además de una carta. Con un poco de miedo la abrió.
Sano-san.
Después de dejar a su hijo conocí a alguien más, nos casamos y tuvimos a Mitsuki. Él desgraciado me engaño, me abandono por una mujer más joven que yo. No se hizo responsable de Mitsuki la desconoció como su hija.
Hace un año conocí a un hombre, nos casaremos dentro de 6 meses pero no quiere a Mitsuki en nuestras vidas. Ya no puedo hacerme cargo de ella, solo es un estrobo en mi nueva vida.
No me busque y dígale la verdad a la niña. Tenerla fue un error, arruino mi vida y no dejaré que lo haga dos veces. Se que con ustedes estará mejor, si no la quieren déjenla en la calle, dejo de interesarme lo que le pase.
Atte: Kagome
—No puede ser.
Él señor Sano no sabia que hacer. ¿Cómo le iba a decir a una niña que su madre la abandono? ¿Cómo decirle que su madre piensa que es un estorbo y por eso la dejo? Se inundo en sus pensamientos, buscaba una solución.
—¿Mami no ha llegado?—pregunta Mitsuki sacándolo de sus pensamientos.
—No pequeña, tendrás que quedarte a dormir aquí—observo como los ojos de la niña se cristalizaban. Sintió una punzada en su pecho, no quería verla así—. No llores pequeña, dormirás con tu hermano.
—Mami no regresará, ¿verdad?—las palabras de la menor lo sorprendieron—. Escuche como mami le decía a un señor que me dejaría—comenzó a llorar—. Mami ya no me quiere, ¿soy mala?—las palabras de la niña hicieron sentir mal al mayor, la envolvió entre sus brazos. Era una niña mu valiente, dejo que se desahogara.
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La dama de ToMan || Wakasa Imaushi
FanfictionEllos buscaban a alguien que los quisiera y cuidará sin importar lo que son. Ella buscaba una distracción, una forma de olvidar lo que sucedió. Ella llegará a sus vidas, los cuidara y los juntará sin darse cuenta. Ella será su salvación, su luz en s...