Capítulo 24

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Cuando Shaoran llegó a la villa de Fye, todos estaban en el salón, miró a todos sin expresión, pero al ver a Sakura sus ojos cambiaron un poco para luego retirarse. No le interesaba el porque estaban ahí.

Se encerró en su habitación viendo el volante que cayó en su rostro. Recuerda todos los bailes que hizo en el nigth club de Japón, se preguntó si el señor Reed no estará preocupado por ellos? Desde que fueron secuestrados ninguno volvió a dar la cara, solo Fye fue el único decente que renunció.

Suspira con fuerza, tiene un plan en mente y no se va a echar para atrás. La puerta se abre y Xen entra con el ceño fruncido y los brazos cruzados, Shaoran solo arrebola los ojos.

—¿No te han enseñado que se debe tocar la puerta?—su hermano lo ignora y sigue con la mirada enojada—¿Qué quieres?

—Ya sabemos porque Sakura y tú terminaron¿No crees que estás siendo muy infantil?—Shaoran suelta una carcajada burlona—¡Es enserio Xiao-Lang!

—¿Te escuchas? Haber que fuera tu caso¿Estarías tranquilo sabiendo que otro besó a Meiling? Y no me digas que no porque tú también eres igual a mi.

Xen suspira profundamente, se sienta en la cama y mira con intensidad a su hermano menor. Le pide sentarse a lo que Shaoran al principio duda para luego hacerlo.

—Sakura está muy deprimida Xiao-Lang—el susodicho abre los ojos con sorpresa—. Está muy avergonzada e incluso está demasiado pálida¿No la viste cuando pasaste por el salón?

Shaoran lo piensa, los ojos verdes de la mujer que ama están sin brillo y con mucha tristeza, su rostro demacrado es indicio que desde el día anterior ha pasado un infierno.

—Además, su hermano no contesta sus llamadas, el celular la manda al buzón, teme que Amamiya lo haya desaparecido.

—¿Cómo dices?—Shaoran se preocupa, si al profesor Kinomoto le sucede algo, Sakura no podrá soportarlo, es su único pariente—¿Dónde está ella?

—Con Tomoyo y Meiling en su habitación—sin esperar que diga algo más va a buscar a la mujer que ama.

Toma aire antes de tocar la puerta, al abrir unos ojos rubí lo miran con asombro para luego ponerse a un lado y dejar que ingrese. Las dos jóvenes que están en la cama se levantan de prisa, ámbar y verde se conectan y Shaoran se siente miserable, su amada sigue llorando y ya no puede soportarlo más.

—Dejennos a solas—pide sin dejar de verla.

Tomoyo y Meiling se miran y luego a Sakura, ella les hace un movimiento de cabeza en señal de afirmación. Cuando se van Shaoran se acerca a ella y la abraza dejando en shock a Sakura.

—Soy un idiota, no te merezco, siempre echo a perder todo lo bonito de nuestra relación—susurra en su oreja, la de ojos verdes pasa saliva, está tan rígida que eso para Shaoran es señal que no está contenta que la toque—. Perdóname Sakura, perdóname por no escucharte, por dejarme llevar por los celos, te amo demasiado y cuando se trata de ti no puedo evitarlo.

—Yo...—el la suelta con suavidad, sus miradas se encuentran, en ella hay muchas cosas que no han dicho e intentan decir, Sakura tiene un nudo en su garganta que está muy ajustado de desatar y Shaoran quiere gritar que la ama pero la imagen que se ha creado de ella besándose con Fye lo frenan—. Ayer fuiste claro conmigo Shaoran. Para ti soy…

—No lo dije en serio—murmura pero ella lo escuchó—. Lo que me dolió más fue que no me lo hayas dicho tú.

Eso sorprende a Sakura, si cayó fue por eso que ha pasado. Tenía miedo que él se ponga violento y vaya contra Fye golpeándolo y que sus años de amistad se pierdan por eso.

𝔼𝕝 𝕊𝕥𝕣𝕚𝕡𝕡𝕖𝕣 𝕕𝕖 𝕞𝕚 ℂ𝕠𝕣𝕒𝕫𝕠𝕟Donde viven las historias. Descúbrelo ahora