EXTRA 2: HAN PASADO CINCO AÑOS, PARTE 5

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Ryujin POV.
Jihyo viene con su esposo y Jacob a pasar fin de año conmigo y con Yeji. Yuna viene de visita sorpresa en la mañana. Pasará con sus padres y luego volverá a Londres porque tiene que trabajar.

Verla interactuar con Yeji es de lo más cómico. Se vuelve una estúpida, yo nunca la había visto así. Por más que las molesto, ambas me dicen que no pasa nada y yo las dejo que sigan viviendo en su mentira. Igual disfruto de sus espectáculos.

Yuna es definitivamente la mejor amiga del mundo, no bromeo, es un ángel. Viene en los fines de semana largos y en cada fecha especial. No hacemos más que pedir comida para las tres y quedarnos en mi cuarto viendo películas o chismeando. A veces me dejo convencer de irnos de fiesta pero lo odio porque me convierto en la tercera rueda de esas dos cuando se pasan de tragos. Nunca hacen nada delante de mí o yo no me entero y tampoco pregunto pero sé que algo se traen.

...

El día de mi cumpleaños pasa lo más raro del mundo. Estoy en la sala festejando con mis amigas, cuando de repente tocan la puerta. Yuna va a abrir y me preocupa el silencio que se hace por minutos.

-       Ryujin... creo que tu yo del futuro hizo un viaje en el tiempo y te ha venido a visitar.

-       ¿Qué estupideces dices Yuna? Yo...

Cuando me asomo veo a una señora sacándose su caro abrigo que entrega a mi mejor amiga. Me da vibras de Cruella de Vil. Yuna dice que es mi yo del futuro y yo empiezo a creer que sí, aunque odie admitirlo.

Calculo tiene unos cuarenta. Tiene el cabello largo, negro como el mío y un par de lunares en su pecho (que distingo por su escotado vestido caro) idénticos a los míos.

-       Ryujin –sonríe-.

-       ¿Si? –pregunto confuso-.

-       Olga Shin –me ofrece su mano-.

Cuando oímos que dice "Shin" nos quedamos de piedra.

-       Creo que la recuerdo.

Olga es hermana de papá. Muy poco la vi cuando era una niña, siempre sentí que nunca me quiso o a papá porque sus visitas eran breves. Mamá decía que era una vieja millonaria y que se la pasaba viajando, que por eso no nos visitaba. Con el tiempo no la volvimos a ver y yo la olvidé.

-       Feliz cumpleaños.

-       ¿Cómo sabe que hoy es mi cumpleaños?

-       Eres mi sobrina favorita.

-       Y por lo que sé la única.

-       Con mayor razón. ¿Podemos hablar? Es importante.

No sé qué tiene esta señora que abre la boca y todo el universo hace lo que sea que ordene. No solo porque yo le ofrezco un lugar en el sofá para hablar y una taza de café, sino porque cuando volteo a ver, ninguna de mis amigas está.

-       Usted dirá.

-       Antes que nada, quiero que sepas que no me ha mandado tu papá ni nada por el estilo, con él no hablo desde que...

-       Entiendo. Continúe.

Muevo mi pierna por la ansiedad. No conozco a esta señora, por lo que no se me pasa por la cabeza ni una pista de sus razones para venir.

-       Seré directa, quiero ofrecerte un puesto en mi empresa.

No hago más que reír. ¿Es enserio?

-       Perdóneme pero no entiendo. ¿Usted viene a ofrecerme trabajo?; ¿cree que necesito dinero o algo por el estilo?

Cuando nos vinimos a vivir a Cadsmorie lo hicimos con una mano adelante y otra atrás. Como saben, mamá tuvo que trabajar muchísimo porque papá se la pasaba bebiendo. Hasta yo tuve que trabajar.

Me costó lágrimas, sudor y sangre, pero conseguí que me dejaran tocar en importantes eventos haciéndome de a poco al respeto que hoy tengo como pianista profesional. Mi experiencia en Juilliard y las referencias de mis maestros sirvieron de mucho también. Con lo que ganaba tocando y dando clases en la CSU y particular me hice a lo que tengo ahora.

-       Pues por lo que veo y sé de ti, es obvio que no, pero no es por eso por lo que te lo ofrezco.

-       No necesito el dinero de los Shin, vivo muy bien con lo que he ganado con mi propio esfuerzo. Digo, no estuvieron cuando más los necesitamos, ¿qué quieren ofrecernos ahora?

-       Ryujin déjame hablar –pide con extraña paciencia-. Yo tengo que viajar mucho y ya casi no estoy al pendiente de mi empresa. No quiero heredar la gerencia a nadie en quien no confíe.

-       ¿Gerencia?

-       Quiero que dirijas mi empresa. Te quiero al frente de Industrias Shin y de todos mis negocios. Después de todo, eres la última heredera de la fortuna de los Shin.

-       Ya le dije que no me interesa su fortuna, y es que... ¿Se está escuchando siquiera? Soy pianista, no una empresaria.

-       Sé que corre por tus venas ese liderazgo y suficiencia que nos caracteriza a los Shin, no necesitas más, todo lo demás lo puedes aprender.

-       Es una locura.

-       Piénsalo –me entrega su tarjeta-.

Toma su abrigo del sofá y se dirige a la puerta. Me doy cuenta...

-       Espere –la detengo-. Industrias Shin está en...

-       Londres –completa-. Tendrás que viajar a la ciudad todos los días o irte a vivir allá, lo que mejor te parezca.

La señora Olga no dice nada más y se va. Jihyo, Yeji y Yuna salen de la cocina viéndome con una sonrisa que no logro descifrar.

-       Definitivamente estas cosas solo le pasan a Amelia Termópolis y a Shin Ryujin –ríe Yuna-.

-       ¿Qué dices?

-       No todos los días se nos aparece una vieja ricachona a decirnos que somos princesas de Genovia. O en este caso, herederas del trono Shin.

-       ¡Ningún trono! Lo que me propuso esa mujer es una locura.

-       ¿Me vas a decir que no te tienta la idea? –pregunta Jihyo con una sonrisa sugerente-.

-       Vamos Ryujin –Yuna se pone de rodillas. Está loca-. Vivirás en Londres y nos veremos más seguido. Podrás ver a...

-       Ni la me menciones Yuna –la corto en el acto-.

-       Lia no es Voldemort, Ryujin, es tu oportunidad, no la desaproveches. Han pasado cinco años, ya es hora.

-       Esto no es... yo no... ¡Soy una pianista! No sé dirigir una empresa.

-       Aprenderás.

-       Yeji, tu universidad...

-       Me quedan dos semestres, puedo ir y venir. No pongas excusas que no seré yo la que te impida ir a reencontrarte con el amor de tu vida.

Están locas todas. El mundo entero está loco. Yo estoy loca porque termino dejándome convencer por el destino y estas tres desadaptadas, que no esperaron ni que llegara de hablar con mi tía días después cuando ya me tenían las maletas listas, de que es tiempo de recuperar mi felicidad. Es tiempo de recuperar a mi Lia.

"EN NOMBRE ̶D̶E̶L̶  DE NUESTRO AMOR" // JINLIA // (RYUJIN+LIA ITZY)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora