Misterio.

327 42 0
                                    

Aquella mañana prometía ser una común y corriente en la vida de la castaña, esperaba que se apegara completamente a su rutina para que no hubiese sorpresas como la que había tenido la semana pasada.

A decir verdad, Jennie aun no podía dormir por las noches debido al acontecimiento de la chica con la melódica y aquello estaba comenzando a fastidiarla.

Sus clases habían pasado extrañamente rápido aquel día, y eso en verdad había logrado sorprender a la chica. En realidad, no había pasado algo sumamente importante esa mañana, había sido un día común de instituto con la excepción de que Rosie, una de sus mejores amigas, le había sugerido ir al centro comercial con ella esa tarde; propuesta que animadamente aceptó.

—¿Y ha sucedido algo divertido en tu vida últimamente, Jen?— Preguntó la más alta mientras revisaba prenda por prenda en la tienda en la que se encontraban justo en ese momento.

Jennie no estaba muy segura de querer contarle a alguien más lo que había sucedido hacía ya una semana en el bosque. No estaba de humor para escuchar preguntas para las cuales ni siquiera ella tenía la respuesta. Sabía que terminaría contándole en algún momento, pero ese momento no era hoy, estaba cien por ciento segura de eso.

—Nada que reportar.— Respondió Jennie después de un par de minutos.

En cuanto la mas alta término de inspeccionar la tienda completa, sin exagerar, salió cargando cinco enormes bolsas de ropa, Jennie inmediatamente se ofreció para ayudarle a llevar la carga del día de hoy; su amiga no se negó.

Estuvieron caminando sin dirección alguna un par de minutos más, hasta que Jennie decidió detenerse en un lugar; la tienda de discos. Inmediatamente, la castaña le informo a su amiga que entraría a la tienda sólo para echar un vistazo, y era verdad, no tenía planeado comprar algo en específico, sólo quería entrar para ver si algo podía llegar a llamar su atención.

Aceleró el paso de sus pies en el momento en que entró a la enorme tienda de discos, se sorprendió al notar que no estaba lleno de gente como comúnmente lo estaba; sonrió débilmente gracias a ello.

Comenzó a caminar por todos los pasillos del enorme establecimiento buscando algo que lograra captar su atención. Desgraciadamente ninguno de los títulos consiguió hacer que se detuviera.

Soltó un suspiro y siguió con su camino.

Jennie tenía toda la intención de salir de aquel enorme tienda, puesto que había recorrido el área de discos por completo pensó en irse de inmediato, pero algo la detuvo.

A decir verdad, ella ni siquiera sabía muy bien que era ese algo, simplemente algo en su interior le dijo que debía echarle un vistazo a aquella área de la inmensa tienda que nunca se había detenido a observar.

La sección de instrumentos.

Se pregunto a si misma por qué estaba a punto de hacer aquello, en verdad quería saber por qué justo ese día algo en su interior le dijo que debía empujar aquella puerta de cristal que separaba el panel discográfico con el de instrumentos.

Ella no tocaba ningún instrumento musical, entonces ¿Por qué estaba haciendo algo así?

Sinceramente, no tenía ni idea.

"No lo pienses, sólo abre." Se dijo a si misma.

Frunció el ceño, confundida, seguía sin saber por qué estaba ahí, pero daba igual; no había vuelta atrás.

Se rascó la cabeza mientras observaba todo a su alrededor, una enorme cantidad de guitarras estaban colocadas perfectamente en diferentes estanterías, habían teclados, bajos eléctricos, instrumentos de percusión e incluso algunos de viento.

La Chica En El Bosque //JENLISA//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora