Amor Arreglado~Tom Riddle FanFiction

Capítulo 23.

El preferido.

–No les creo nada.–dijo la mujer

–¡Mamá, es en serio!–lloriqueó George al ver que su madre no le creía que su hermana estaba en la casa

–Está en su habitación, Molly. Te lo juro.–le dijo Lee

Molly lo miró con los ojos entrecerrados y tomó una cuchara de madera de la cocina.

–Si Joanne no está arriba, les daré a ustedes dos con esta maldita cuchara.–amenazó la pelirroja y subió las escaleras a zancadas con sus dos hijos y su yerno detrás

–¿En serio está arriba?–le preguntó Fred en un susurro a su gemelo

–¡Que sí!–respondió él–Vino en la mañana.

–¿Por qué demonios vendría, no se supone que no pueden?

–No lo sé.–se alzó de hombros–Pero está con Thomas.

–¿Con Thomas?

Lee asintió.

–¿Durmiendo juntos?

George se encogió de hombros.

Allí Fred tuvo curiosidad y empezó a correr escaleras arriba. Si era cierto que estaban dormidos, tenía que verlo con sus propios ojos. Así podría molestar a si hermana mayor con algo.

–¡Ha!–el pelirrojo abrió la puerta de golpe, sobresaltando a la pareja que estaba en la cama

Ambos estaban de cucharita, ni siquiera estaban durmiendo, ya no lo habían podido hacer luego de aquel beso, pero quedarse escuchando música por el tocadiscos era un buen plan.

–¡Jojo!

–¡Freddie!

La pelirroja se levantó y se lanzó encima de su hermanito, dándole un fuerte abrazo. Justo en medio de eso, llegó Molly con George y Lee.

–¡Mi niña!

–¡Mamá!

Joanne la abrazó y le llenó la cara de besos. La había extrañado muchísimo.

–Te lo dije.–canturreó George

Molly amenazó a su hijo con la cuchara y siguió abrazando a su niña, hasta que se percató del pelinegro que estaba sentado en la cama.

–¡Thomas, cielo!–la mujer lo abrazó fuertemente, tan fuerte que el pelinegro ni siquiera podía oponerse

–Mamá, lo vas a matar.–le dijo Fred en tono burlón

Ella miró mal a su hijo para luego tomar a Thomas del brazo y arrastrarlo hacia afuera.

–Ven, cielo. Te prepararé el desayuno.

Joanne miró a sus hermanos incrédula.

–¡Hey, yo soy tu hija!–se quejó

Sin embargo, Molly ya iba bajando las escaleras con el pelinegro.

Ella rodó los ojos y tomó una camiseta de Thomas para acto seguido, salir de la habitación con los chicos detrás.

–¿Si sabes que estás en panties?–le preguntó Lee

–Así duermo.

–Que confianza.–Fred alzó las cejas

Joanne le golpeó el brazo.