Amor Arreglado~Tom Riddle FanFiction

Capítulo 51.

Antes del cap, holis
Perdón por no subir nada hasta ahorita 😫 #vidadeunacolegiala

Weno, los dejo con el cap 😗✌🏻
~~~

Juntos.

–¡Suéltame, Barty!–la pelirroja se retorcía en los brazos de aquel castaño–¡QUE ME SUELTES, BARTEMIUS!

Los gritos de dolor de Thomas inundaban todo el lugar, sin embargo, ella no lo veía, y eso la desesperaba más.

A su lado estaba Mattheo, inconsciente y Lara yacía en el suelo, completamente pálida y fría al tacto. Su corazón se estrujó cuando vio a Eleazar salir de la puerta del fondo, puerta que ella reconocía como la de su oficina. Tenía tomado a Thomas del pelo, mientras lo llevaba a rastras por el pasillo, hasta ella.

Joanne se lanzó a abrazarlo, pero antes que pudiese hacerlo, un rayo verde lo impactó, cegándola en el proceso.

–¡NO!

El grito de la pelirroja provocó respingos en todos, haciendo que alguien prendiera la luz. Thomas, quien estaba sentado a su lado hablando con su hermano, la mirara y se acercara.

–Hey, hey, shh.–intentó tranquilizarla acariciándole el cabello

Al escuchar su voz, la pelirroja se levantó de golpe y lo abrazó. Ella sudaba frío, las lágrimas corrían sin permiso por sus mejillas y tenía la respiración agitada.

–Tommy.–sollozó mientras se aferró más al él

Él correspondió al abrazo algo confundido y preocupado a la vez.

–¿Qué pasó?–le preguntó suavemente

–T-tu... Eleazar... Él te... Tú...–las palabras que salían de su boca eran casi imposibles de entender, pero al entrar a su mente, lo entendió

Las imágenes de un sueño en el que él era torturado y asesinado por su padre se reprodujeron, dejándolo un poco en shock. La abrazó con más fuerza mientras le repetía una y otra vez que él estaba bien y estaba con ella, hasta que se quedó dormida de nuevo.

No había sido necesario que Thomas hablara para que Mattheo se enterara del sueño, y había quedado tan en shock casi como Thomas.

Hacía solo unos días había sucedido el duelo de Alecto, y al recibir una carta de Eleazar diciendo que quería verlos, era claro que ya sabía todo. De ahí podía venir que Joanne soñara con eso. El miedo a que algo le pasara era demasiado fuerte y Thomas mentiría si le dijera que su padre no era capaz de eso, porque si lo era.

Los dos pelinegros se quedaron despiertos lo que restó de la mañana, hasta que todos empezaron a levantarse para ir a sus clases.

Joanne se despertó con una apariencia terrible. Tenía orejas y los ojos tan hinchados y rojos que casi ni podía abrirlos. Apenas vio a Thomas, se giró y le dio un gran beso en los labios, un beso desesperado, como si de verdad lo hubiese perdido.

–Buenos días, mi amor.–le dijo él con una sonrisa, con la respiración algo agitada por tal beso

Ella sonrió un poco, notando como sus lágrimas volvían a salir.

–Ya no llores.–pidió Thomas quitándole las lágrimas con su pulgar–Aquí estoy y no me voy a separar de ti.

–Como si pudieras hacerlo.–bromeó la pelirroja sorbiendo su nariz