Los días pasaban formándose semanas e inclusive meses, la búsqueda de la única estrella del imperio es decir la princesa imperial Alice Alger de Obelia era sumamente desesperada, no solo la estaban buscando los guardias imperiales sino que el sagrado templo se unía en la pesquisa, pero como era descrita y denominada meses atrás como "La Traidora del Imperio" ese seudónimo se había sustituido en las papeletas de búsqueda por el título de "ayúdanos a encontrar a la princesa heredera" en la cual ofrecían de recompensa cualquier deseo o petición mientras estuviera al alcance del emperador; pero volviendo a lo retomado ¿En dónde se encuentra la princesa?
- Deberías comer más. – Exclamo Lucas metiéndole a la boca un pedazo de carne.
- Es cierto princesa, recuerde que debe comer por 3. – Hablo Carlos mientras deja en la mesa su vaso.
Alice mastico y trago la carne para después limpiarse los labios que tenían un poco de grasa del alimento.
- Por favor detente Lucas, estoy satisfecha no puedo comer otro filete más.
Lucas miro con resignación y se llevo a la boca lo que sobraba de comida del plato, cuando termino miro a la mujer que lo acompañaba. – solo comiste 7 filetes, si te preocupa que la ropa no te quede, no te agobies por cosas tan insignificantes yo te conseguiré los mejores vestidos que ninguna mujer en cinta de la nobleza ha tenido.
- Estoy muy agradecida contigo, pero no debes dejarme como una sandia.
La carcajada de Alice hizo que Lucas sonriera con felicidad, este mismo silenciosamente se colocó en cuclillas y poso sus grandes manos en el vientre de Alice notando un ligero movimiento en la dirección en donde se posan sus manos.
- Parece que ellos te adoran Lucas. – sonrió Alice con delicadeza.
- Es normal ellos ya me conocen. - Lucas siguió acariciando el vientre de Alice con suavidad. - ¿Cómo pueden estar bien en un vientre tan diminuto? Sinceramente a pesar de que te obligo a comer más, no hay mucho aumento a simple vista juraría que estas en cinta de uno y no de dos.
Lucas dejo de tocar el vientre de Alice para después observar el cabello rubio de ella sin duda era sumamente hermoso, pero empezaba a carecer de su brillo y se apreciaba unos ligeros mechones rojizos, con ojos serios lucas continúo examinándola.
- Apenas cumpliste 5 meses que estas en cinta y los gemelos están absorbiendo tu mana monstruosamente, necesitas que alguien también te alimente de mana y por desgracia debe ser un mana igual de imperial.
- ¿Quieres decir que mi señorita debe volver con ese bastardo? . – Dijo Carlos molesto.
- Lamentablemente es el único con mana imperial que puede darle a Alice un poco más de estabilidad.
Clara llego a donde estaban las 3 personas y tiro todas las cosas que había comprado del pueblo, causando que Carlos le gritara molesto.
- ¡Señorita! Me ha llegado esta carta por mi buzón mágico de parte de un miembro de la familia York que sirve exclusivamente a la bruja de Siodonna. – Grito Clara mientras que le entregaba el sobre a Alice.
- ¿Acaso no les advertí de no usar sus herramientas mágicas?, ¿Planeas que encuentren a tu señorita? – Hablo molesto Lucas.
- Se que no debía hacerlo, pero en todo el pueblo hay este tipo de papeletas, según lo que investigue dicen que el emperador se ha arrepentido y es por eso por lo que utilice mis herramientas mágicas.
Alice ignoro las palabras de Clara y abrió el sobre para leer el contenido de la dichosa carta.
Princesa Imperial.
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¡Debo sobrevivir del Tirano!
FanfictionRenacer sin haberlo pedido es algo que le sucedió a nuestra protagonista y no en cualquier historia, si no, en la famosa novela de Princesa encantadora; donde ni siquiera este personaje es mencionado en la novela ni mucho menos recordados por el aut...