s e s e n t a y c i n c o.

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— Yo...vi el retrato que hiciste de mí...— soltó nervioso.

Era algo de esperarse el que lo haya visto, así que intento guardar la calma y no sobresaltarme por este remolino de emociones que estoy sintiendo, ocultándolo y queriendo verme neutral.

— ¿Enserio? — respondí, rogando desaparecer porque sentía mi cara enrojecer.

— Si...— afirmó — Es algo que jamás olvido — sonrió un poco, cosa que echaba de menos porque casi no lo demostraba.

— Que...que bueno — fue lo único que pude decir, no sabía que expresión tomar ante esto, pero de una forma es que estaba sintiéndome bien después de todo.

Como de costumbre, nos mantenemos sin poder sacar una palabra, creía que si lo hacía, podía actuar de manera estúpida quedando muy mal a su lado, siempre con esa inseguridad que he llevado desde que me la crearon.

Segundos después, algo hizo que vuelva a la realidad, y fue cuando oí una risa de su parte, a lo que pongo un rostro sin entendimiento.

— ¿Pasa...algo? — digo extrañada, pero también me estaba poniendo del mismo modo por verlo un poco contento.

— Perdón....— se medio calmó — Es que no se si reírme o recordar lo triste que fue...pero...cuando me puse a buscarte...— me miró ya serio — Tu madre me había dicho que te habías ido a Dallas, no le creí, pero cuando no te hallaba en la ciudad, tomé la opción de...— vuelve a reír — De buscarte en el aeropuerto — negó.

— ¿Enserio fuiste ahí? — quise reírme igual, de hecho, no me molestaba por si pensaba que se estaba burlando, lo contrario.

— Si...incluso le pregunté a varios trabajadores sobre el vuelo a Texas, que por cierto no lo habían — continuó riendo conmigo.

— Bueno...si no fuera por estas cosas que me pasaron, yo creo que si estaría allá luego de haber acabado el año — mencioné cuando las risas cesaron y me miró detenidamente.

— Menos mal...— dijo en susurros poniéndome confundida.

— Aidan...— lo llamé ya estando serios — No debiste esmerarte tanto para encontrarme, pudo haberte pasado algo con la lluvia...— mencioné angustiada.

— Si estuvieras en mi lugar...no sabrías lo que sentí...— usó un tono de voz que no había oído salir de él — Y ahora estoy más...más mejor de tenerte, es decir de...saber que estás bien — corrigió finalmente.

Le dediqué una sonrisa diminuta, era lo que podía expresar ante sus palabras sinceras, nada de lo que venga de él era falso y eso me hacía entrar en confianza a su persona.

Por un momento me olvidé lo malo que me pasó, y ahora mi conciencia vuelve a atacarme con ese asunto.

— Es terrible aún esto para mí...— murmuré de la nada recordando lo sucedido.

— ________... — llamó y lo miré — Deja de pensar en ese día, no te hagas más daño.

— Lo sé... — alargué — Es que...todo fue inesperado, solo porque mi padre abandonó la casa.

— ¿Fue por eso? — se puso al tanto — En verdad lo siento mucho...

— No, creo que no importa... — negué — Siento que hubo una razón para eso, y que mi mamá me mintió el por qué se fue.

— No sabría que decir, jamás conocí a tu padre — pareció indeciso — Por lo que oigo, debes de estar mal por eso ya que...en algún momento tuviste mejores momentos con él ¿no?

Sadness ➵ Aidan Gallagher.✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora