Sadness ➵ Aidan Gallagher.✔

o c h o.

Narra _______.

Hay un clima nublado, pero eso no nos impidió a Blake ni a mi en pasar tiempo juntos, han sido varios días desde que llegó a la ciudad por lo que no hemos tenido la oportunidad de comunicarnos bien, así que esta es la ocasión indicada.

Caminamos por uno de los parques de la ciudad, hablando de un tema cualquiera e intercambiando risas, si la persona correcta para hacerte reír, sin duda puede ser él.

Al final optamos por descansar y tomar asiento en una de la bancas donde varias personas también circulaban cerca de nosotros.

- Contigo enserio jamás dejo de reír - dijo secándose los ojos por tanta risa.

- Lo dices solo porque me río como foca retrasada por tus chistes malos - me contuve.

- Bien, bien, ya es suficiente - trata de ponerse serio, pero no lo logra al igual que yo - Ok, ahora así - toma compostura.

- ¿Ha pasado tanto, no lo crees? - cambié de tema mirando al frente.

- ¿De qué? - pareció no entenderlo.

- De momentos como este, pasar tiempo juntos - le aclaré.

- Ah...claro - suspira - Aunque solo fueron dos años, pero pareció una eternidad - asiente.

- Si... ¿Qué tal Nueva York? ¿Es grandioso como todos dicen? - empecé a sacar la plática.

Se mantuvo más serio guardando algo de silencio, como si no deseara escuchar lo que acabo de decir.

- Es...un lugar bonito, bueno, no es como si fuera la cosa tan asombrosa, solo es una ciudad cualquiera como las otras - se encoge de hombros.

Presiento que tenía algo oculto, pues por lo que recuerdo, su emoción que tenía por ir a Nueva York era tan grande, que hasta en los últimos días que pasaba con él no dejaba de hablar de ello.

- ¿Qué hay de ti? ¿Cómo has pasado la vida? - esta vez me hace las preguntas.

- Supongo que no hay mucho que decir, desde que te fuiste las cosas han estado igual - mencioné sin importancia - La escuela, tareas, proyectos...y la familia - concluí no tan convencida.

Y ese último era el problema, mis papás y mi hermano que han tomado una forma de ser no tan agradable del cual no me gusta tratar hasta entonces.

- La familia...claro - me mira con una sonrisa que parecía forzada y con eso me bastó para darme cuenta que algo también andaba mal en él - Eché de menos a todos - se sincera.

- Yo también - confesé - Al menos me alegra tener a alguien como tú en el que confiar, desde que he llegado aquí... parece que todos me tachan de extraña - conté triste, eso era una gran realidad.

Segundos incómodos se adueñaron de ambos, tengo mucho que decir pero no estaba lista para sacarlo. Y Blake, no me podía engañar, la inseguridad lo delata, y yo tampoco podía esconderlo, mi seriedad es una de mis señas de que no andaba bien.

- Cuando había hecho seis meses viviendo en Nueva York, me di cuenta de que era demasiado tarde - me giré a verlo sin comprender a lo que iba - No me quiero mentir, ni a nadie más de esto - baja la mirada y procede a arrancar unas tiras verdes del césped.

- ¿Fue malo? - cuestioné lo que creía que estaba insinuando.

- Más que eso - admite levantando de nuevo su rostro sin verme a los ojos - A puras penas logré terminar el año en la universidad, de hecho, ni siquiera lo concluí, era todo un sueño antes de entrar ahí, tener amigos, mejores notas, o incluso ser popular...- suspira - Nada de esas perspectivas se hicieron realidad.

- ¿Y luego?...- quise que prosiguiera.

- No sé si estoy listo para hablarlo, nunca me sentí escuchado y...- lo interrumpí.

- Blake, sabes que estoy contigo, no dejes que el miedo te detenga, puedes contármelo, estoy atenta - le ofrecí la confianza que necesita.

- Gracias... - aceptó - Cuando entré creí que todo saldría como lo pensaba pero....- corta la oración y traga duro, haciendo que me arrepintiera de haberle insistido.

- Oye si no quieres, te entiend... - me detiene.

- No, no te preocupes - me mira comprensivo - Necesito sacarlo, así creo que me sentiré menos solo.

- De acuerdo.

- Fui víctima del bullyng - suelta impresionándome - La escuela de allá tiene una forma muy exigente de ver los estándares del físico, y me empezaron a poner etiquetas muy malas, fue muy confuso por como me trataban - estaba tan decepcionado.

- ¿Pero...por qué?.

- También quisiera saberlo en aquel entonces, por eso me convertí en lo que soy ahora.

- ¿Es por eso que tú...? - señalé su apariencia, era muy notorio el cambio de peso.

- Si - afirma con un resoplo - Es muy ridículo como para tomármelo tan personal, pero necesitaba ser incluido, estaba solo, por eso hice cambios en mi alimentación y otras cosas que...mejor ni mencionarlo - niega - Y no llegué a nada.