-¡Por favor! - grito colérico apareciendo en medio de las escaleras principales - ¿Acaso nadie lo huele?
Me detengo a mitad del camino porque, al pie de la escalera se encuentra una humana esbelta, de cabellos rojos fuego recogido en una larga trenza, un vestido blanco hasta las rodillas de mangas cortas que dejan ver sus tonificadas piernas que van sobre ballerinas.
Un solo pendiente hecho en diamante de forma oval en su oído derecho es lo que lleva por joyería.
Bajo las escaleras lentamente y ella une sus manos por delante de su regazo mientras me sonríe con unos ojos que parecen de plata.
Respiro en su dirección y me sorprendo ante la mezcla de tantas emociones diferentes, prevaleciendo la decisión y pureza.
Evito hacer un mohín de desagrado ante la saturación en mi nariz del olor de su pureza. Deslizo una vez más mi mirada sobre toda la extensión de su cuerpo, el cual es fantástico. Me encantaría corromper su alma inmaculada.
Pero su belleza es eclipsada por las dos maletas de equipaje que hay a sus pies. Uno el entrecejo, no comprendiendo.
-¡Jasper! - grito, haciendo que ella se sobresalte -
Una nube de humo da paso a la figura delgada vestida de traje negro inmaculado que es el principal de esta estancia.
-¿Qué significa esto? - pregunto irritado - ¿Quién es esta?
-Cualquier pregunta que tenga puedo responderla. - interviene - Estoy justo aquí.
Su voz, a pesar de que se le escucha molesta, es tan suave y dulce que casi me provoca nauseas. Algo no está nada bien con ella. Lo siento en la sangre, incomodándome.
-Voy a romper una de mis reglas por medio minuto. - digo fastidiado mirándola despectivamente- Escúchame. - me dedica una profunda mirada de ojos grises - Lo humanos son comida y con la comida no se habla. - le digo, para después dirigirme a mi mayordomo - ¿Jasper?
-La señorita recién ha llegado, el Sr Nataniel le dio la bienvenida. - por qué mi padre haría tal cosa - Es un huésped. Su huésped.
-¿Mi huésped? - pregunto entre sorprendido y aterrado -
Por toda respuesta me muestra un sobre sellado con el escudo de la familia hecho en cera roja.
No suelo ser una persona grosera e impaciente, pero desde que percibí el olor de ella me siento algo inestable. Por lo que arrebato el sobre de las manos de mi mayordomo y rompo el sello en un segundo.
La pomposa letra de mi padre aparece ante mis ojos y, mientras voy leyendo la misiva, mi sangre comienza a entrar en proceso de ebullición.
¿Recuerdas tus palabras de unos días atrás? ¡Estoy dispuesto a sacrificar cualquier cosa para que los humanos nos dejen en paz! Gritaste más que enfadado.
Pues bien, te las tomo al pie de la letra.La señorita Eusford llega hoy a casa. Recíbele como si fuese una reina, aunque...en eso se convertirá, ya que es tu prometida.
Este compromiso (o sacrificio) nos deja en paz con los Cazadores.
Tu madre y yo les dejamos la casa para que se "entiendan" entre sí. Tienen tres semanas antes de que Ellie regrese.
Daeminium-No puede estar hablando en serio. - me quejo mientras aprieto la carta en un puño para después hacerle arder - ¿Prometida? ¿Es una broma Jasper?
-Desconozco la situación. - alega impasiblemente, pero no me creo ni una de sus palabras, mi padre no realizaría un movimiento como este sin consultarle -
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Luz [COMPLETA]
RomanceEs apuesto, sexy e irresistible. ¿Lo peor? Él lo sabe. Evangeline sabe que pude caer rendida ante sus pies. Ahora... ¿Cómo lograr que un Demonio de la Lujuria te deje entrar en su vida? Simple, le obligas a casarse. Ethan no sabe lo que es el amo...