Después de la charla con Aslan me dirigí a la tienda y me acosté para dormir.
-Adeena- escuché susurrar a Peter.
-Mmmh-
-¿Estás dormida?-
-Mmmh-
-Gracias- fue lo último que escuché antes de que el sueño me venciera.
~~~
-Dejen algo de comida narniana-.
Edmund y yo reímos, la verdad es que los dos (aunque más Edmund) estábamos hambrientos.
-Déjame, solo me desperté porque el hambre ya no me dejo dormir-
-Les van a dar algo para el viaje de regreso- habló el rubio.
-¿Regresamos?- preguntó Susan confundida.
-Ustedes sí- dijo Peter sentándose con nosotros -Le prometí a mamá que los mantendría a salvo, pero lo mejor será que me quede aquí un tiempo-.
-Para tu suerte no compartimos mamá- hablé mientras le daba una mordida a mi pan.
-No Adeena, ya no voy a dejar que te arriesgues. Casi te matas al ayudarnos-.
-Pero nos necesitan- habló Lucy -A los cinco, Peter-.
-Es demasiado peligroso. Te ibas a ahogar, Edmund casi muere y mira lo que le pasó a Adi-.
-Oye gracias, eh- dije mirando mal a Peter.
Antes de que el mayor respondiera Edmund habló.
-Por eso debemos quedarnos. He visto lo que la bruja ha hecho y además yo le ayudé, no quiero que por mi culpa sufran los demás-.
Peter lo miro con una sonrisa al igual que yo, definitivamente este no era el mismo Edmund que el de antes de entrar al ropero.
Pero como dicen por ahí, las personas sacan a la luz su verdadero ser cuando están en una situación de vida o muerte.
-Pues supongo que está decidido- dijo Susan.
-¿A dónde vas?- le preguntó Peter.
-Tengo que practicar- tomó su arco y se fue con Lucy caminando detrás de ella.
Me levanté para ir por mis cosas, pero ese momento caí en cuenta que mis armas las había dejado junto al lago, por suerte Edmund me aviso que las habían llevado a la tienda que compartía con las chicas.
Oreius nos guiaba en el entrenamiento, nos decía como sostener las espadas, movimientos de ataque y defensivos. Además, me enseñó como tomar correctamente el hacha y el cómo usarla durante el combate.
-Suban a los caballos, deberán practicar como defenderse arriba de uno-
Camine hacía uno, pero Oreius me tomo del hombro.
-No tomarás esta parte del entrenamiento, iras con el grifo para que te enseñe a practicar tu vuelo. Ve a la cima de la colina-.
-De acuerdo-.
-Ten cuidado- dijo Edmund.
-Sí. Los veo después-
Llegué a la colina donde había un grifo esperando por mí.
-Buen día- saludé.
-Buen día, Adeena ¿Estás lista?-
Dirigí mi vista hacia abajo para ver la altura.
"El lado bueno es que si fallo al volar la altura tal vez me mate al instante".
-No hay nada que temer- dijo el grifo al ver mi expresión -Cuando lo domines será tan fácil como respirar-.
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Las Crónicas De Narnia: 𝔼𝕝 ℍ𝕒𝕕𝕒 𝔾𝕦𝕖𝕣𝕣𝕖𝕣𝕒 [Edmund Pevensie]
أدب الهواةAdeena Sanz es enviada a casa de su abuelo debido a los recientes bombardeos en Londres, ella sólo esperaba una larga y común temporada en aquella vivienda, sin esperarse que la llegada de 4 hermanos cambiaría su vida para siempre. Edmud x Adeena. ...